NUEVA YORK - La ciudad que nunca duerme ha tomado un enfoque literal de su apodo con casi tres semanas de fuegos artificiales nocturnos sin parar. Los líderes de la ciudad de Nueva York quieren saber quién o quiénes son los responsables y cómo los fuegos artificiales entran en la ciudad.
Durante el mes de junio ya se han reportado más de 1,700 quejas relacionadas con fuegos artificiales. Por lo general, solo hay unas pocas docenas de esas quejas durante ese período de tiempo, con solo 21 registradas durante este tiempo en 2019.
El uso ilícito de fuegos artificiales en las esquinas de las calles y los tejados de los edificios no es una acción ajena en los vecindarios de la ciudad en los días previos al 4 de julio, sin embargo, en las últimas semanas, se ha presenciado un aumento extraordinario de estos comportamientos que no son permitidos.
El presidente del condado de Brooklyn, Eric Adams, y el miembro del concejo, Robert Cornegy, dicen que varios de vecindarios de Brooklyn son los que encabezan la mayoría de las quejas relacionadas a este tema en los últimos meses en toda la ciudad: esos vecindarios son Crown Heights, Bedford-Stuyvesant y Flatbush.
Adams y Cornegy quieren que la ciudad despliegue recursos adicionales para tomar medidas enérgicas durante estos comportamientos nocturnos. El domingo por la tarde, ambos pedirán a la ciudad que usen grupos de Cure Violence para responder a las quejas de fuegos artificiales. Ambos dicen que la Policía debe investigar la fuente de estos fuegos.
Si bien, en la ciudad es permitido comprar las pequeñas bengalas que los padres dejan que los niños giren hasta que se enciendan rápidamente, el tipo de fuegos artificiales que crean las explosiones en Brooklyn no se pueden vender legalmente en Nueva York.
Un portavoz de la policía enfatizó que los fuegos artificiales son ilegales en la ciudad de Nueva York e instó a las personas a denunciar las violaciones que los involucran. La residente de Brooklyn, Brittany Sturrett, no ha hecho eso, aunque dijo que el ruido es una molestia.
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"Están a una cuadra de mi casa", dijo. "Los veo desde mi ventana y asustan a mi perro".
Los vecinos dicen que los fuegos artificiales son una forma de expresión, especialmente durante esta época del año y este momento en la historia de la ciudad de Nueva York, y es algo hecho por diversión.
No es solo en Brooklyn, tampoco. Los residentes de El Bronx también notaron un repunte, y un joven de 18 años fue golpeado el martes en la noche en el pecho con uno. En Fordham Heights, se podían ver tubos de proyectiles y fuegos artificiales ya usados esparcidos por la calle, con algunos vecinos preocupados por su seguridad.
"Necesitan enviar Policías aquí para monitorear este bloqueo, realmente se está yendo de las manos", dijo una residente de Fordham que se identificó como Carmen. "El otro día, se sentía el olor de los fuegos. Oler eso en mi habitación, es ridículo".
Los fuegos artificiales no se limitan en la ciudad de Nueva York. Se les puede escuchar más al norte en el condado de Westchester, y están sonando más de lo normal en lugares de todo el noreste. Boston, Baltimore, Hartford, Connecticut y Syracuse, Nueva York, se encuentran entre las ciudades donde los residentes han notado un fenómeno similar.
