NUEVA YORK -- El sospechoso que supuestamente mató a tiros a un padre dentro de una bodega de Manhattan mientras su hija miraba fue arrestado, según la policía.
Joseph Morros, de 27 años, fue acusado de asesinato y posesión de armas por el tiroteo que ocurrió el 15 de diciembre en 144 Deli Grocery en Nagle Avenue en Inwood, dijo la uniformada. La víctima, Tykeem Berry, estaba dentro de la tienda de delicatessen poco después de las 4:00 p. m. para comprar meriendas para su hija cuando ocurrió el incidente mortal.
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El video de vigilancia mostró al supuesto atacante, Morros, con una chaqueta verde de North Face junto a la puerta principal de la tienda gritando y tratando de alcanzar algo con la mano derecha. Momentos después, las imágenes muestran a quién le estaba gritando: Tykeem Berry, de 30 años, visto con una chaqueta roja mientras colocaba sus auriculares en el mostrador.
Los empleados detrás de la caja registradora parecían decirle a Berry que se quedara dentro de la tienda, cuando de repente Morros presuntamente irrumpió en la bodega y sacó un arma de fuego. Berry luchó con él, mostró un video, antes de que la policía dijera que le dispararon en el pecho a quemarropa.
Otra cámara de vigilancia capturó al presunto tirador corriendo, cruzando la calle mientras huía del lugar. El dueño de la bodega señaló que la gente se amontonó alrededor de la víctima durante sus últimos momentos.
"Él pidió ayuda, puso la mano, así que todos agarraron y vinieron a ayudar", dijo el propietario Ahmad El-Myndcer.
Alguien que estaba ahí antes de que llegara la policía como testigo dijo que Berry entraba y salía de la conciencia. La víctima fue declarada muerta en el Hospital de Harlem, dijo la policía.
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Lo que las cámaras no captaron fue a los empleados y clientes de la bodega protegiendo a la hija de la víctima, quien estaba dentro de la tienda en el momento del derramamiento de sangre. El-Myndcer dijo que la niña tiene entre 8 y 10 años.
“No quiero que los niños vean a su padre. Lo mataron, los afectará en el futuro, ella tendrá un problema, un problema”, dijo El-Myndcer. “La mantenemos adentro, le damos refrescos, le damos lo que quiera”.
El dueño de la bodega le dijo a nuestra cadena hermana NBC New York que la víctima era un cliente leal de 15 años. Se detenía en la tienda todas las mañanas para pedir un sándwich para su hija antes de dejarla en la escuela.
La policía entrevistó a los testigos, que fueron muchos, ya que había gente dentro y fuera de la bodega. Lo que provocó la discusión entre los dos hombres no quedó claro de inmediato.
