El padre del tirador de Fort Hood Iván López dijo que su hijo “no debe haber estado en su juicio sano mental” y que una serie de factores podrían haber llevado a la violencia que dejó a tres muertos y 16 heridos en Fort Hood.
Iván López Sr. dijo que su hijo era un hombre de familia tranquilo y un buen hijo que defendió a su nación. En el comunicado, la familia añadió que López “estaba bajo tratamiento médico y que el fallecimiento de su madre, su abuelo y los cambios recientes en la transferencia a la base sin duda afectó su condición”.
Los militares, por su parte, han tenido poco que decir acerca de lo que pudo haber dado lugar a los disparos.
De acuerdo al padre de uno de los soldados heridos, el sargento Jonathan Westbrook, López abrió fuego después de que intentó agarrar un formulario para pedir permiso de ausencia y le dijeron que regresara más tarde.
Theodis Westbrook, el padre de la víctima, dijo que su hijo le dijo a López que “volviera al día siguiente a recogerlo”, el hombre se fue, regresó armado y abrió fuego.
Por otra parte, el gobernador de Texas Rick Perry y el senador Ted Cruz visitaron a los militares heridos y el Gobernador dijo que vio la “capacidad de recuperación” entre las familias de los militares que se recuperan del tiroteo masivo.
Perry dijo que “no hay respuestas fáciles” de lo que llevó al soldado a matar a tres personas y después suicidarse.
Puerto Rico
Por otra parte, las autoridades dijeron que la inestabilidad mental aparece como la posible "causa fundamental subyacente" de que el soldado puertorriqueño disparara en contra de otros compañeros en la base militar, aunque un altercado verbal con otro efectivo pudo haber precedido al ataque.
"Tenemos evidencias muy contundentes de que su historial médico muestra una condición psiquiátrica y psicológica inestable", afirmó Milley. "Creemos que esa es la causa fundamental subyacente" de lo ocurrido en la base.
