NUEVA YORK -- Nicole tocó tierra cerca de Vero Beach, en Florida, la madrugada del jueves como un huracán de categoría 1, el tercer huracán de este noviembre en la cuenca del Atlántico, y ahora la tormenta, aunque debilitada, tiene el área triestatal en la mira.
Un frente que se aproxima sólo complica las cosas. Los restos de Nicole se combinarán con eso el viernes, trayendo lluvias al área de la Ciudad de Nueva York para el mediodía antes de que la lluvia y los vientos se intensifiquen. Espere aguaceros torrenciales en ocasiones hasta el sábado por la mañana en todo el tri-estatal.
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Las ráfagas de viento podrían superar las 50 mph en algunos lugares, y se espera que el peor clima llegue durante la noche del viernes al sábado.
En este punto, se espera que se acumule una gran escala de 1 a 2 pulgadas de lluvia hasta el sábado, aunque algunos lugares podrían ver hasta 3 pulgadas, según los últimos pronósticos.
Las inundaciones repentinas son una preocupación para la mayoría de los tres estados, pero especialmente para el norte y el oeste de la Ciudad de Nueva York. También es posible que se produzcan inundaciones y erosión costera menores, y podría haber algunas tormentas eléctricas severas el sábado por la mañana temprano.
La ciudad activó su plan de emergencia para inundaciones repentinas antes de la llegada de la tormenta, lo que requirió que varias agencias se desplegaran en los cinco condados para inspeccionar (y limpiar, si fuera necesario) los sumideros en cientos de lugares propensos a inundaciones.
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Este trabajo ya está en marcha, y se alienta a todos los neoyorquinos a tomar el mismo paso simple de limpieza de escombros para ayudar a prevenir inundaciones. También puede llamar al 311 si desea que la ciudad se ocupe de ello por usted.
Una vez que Nicole, y ese frente no relacionado, pasen por el área tri-estatal, el aire más frío se sumergirá y las temperaturas máximas tendrán dificultades para alcanzar los 50 grados desde el domingo hasta la próxima semana. Es noviembre, después de todo.
Se esperaba que la tormenta arrojara hasta 8 pulgadas de lluvia en partes de la península de Florida mientras golpeaba el estado devastado por Ian con peligrosas olas y marejadas ciclónicas, junto con intensas lluvias y vientos, según el Centro Nacional de Huracanes. El NHC degradó a Nicole a tormenta tropical el jueves temprano, con vientos máximos sostenidos de 60 mph.
La temporada de huracanes en el Atlántico comenzó el 1 de junio y finaliza el 30 de noviembre.
