NUEVA YORK – Algunos le atribuyen sustancias medicinales casi milagrosas, desde hipotensores, hipoglucémicos y antibióticos hasta anticancerígenos; sin embargo, el doctor Mark Olson, doctor del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), advierte que aún no existe evidencia clínica concreta acerca de las propiedades curativas de la moringa.
Aunque si hay indicios de su posible utilidad para regular la glucosa, además de que tiene efectos antibióticos.
“Por ejemplo, se encontró que la bacteria Helicobacter pylori es sumamente sensible ante ciertas sustancias extraídas de la moringa”, se lee en un artículo de divulgación científica de la UNAM.
Pero lo que no está en duda es su valor altamente nutritivo. La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) establece que las hojas de moringa "son ricas en proteínas, vitaminas A, B y C, y minerales: muy recomendables para mujeres embarazadas y lactantes, así como para niños pequeños".
“Las hojas de moringa contienen altas cantidades de proteínas, casi al igual que la leche en polvo, son fáciles de digerir y aportan aminoácidos esenciales (aquellos que el cuerpo no puede producir)”, afirma el doctor Olson en un artículo de la UNAM.
El árbol de Moringa oleifera es original del norte de Sudán, India, Filipinas y Etiopía, pero es común encontrarlo en América Latina, especialmente en Cuba, República Dominicana, Paraguay, Argentina y México.
La moringa se ha convertido en un alimento alternativo a los cultivos tradicionales, como el trigo y el maíz.
La FAO dice que los productos derivados de la moringa poseen alto contenido de calcio y hierro y sus hojas puede consumirse como equivalente de las espinacas.
En la República Dominicana, la moringa comienza a ser cultivada para la producción empresarial. El proyecto, que se anunció el lunes, es impulsado por el ingeniero agrónomo Andrew Hermann, de Ohio.
Local
Los cultivos se realizarán en 300 terrenos de las localidades de Chirino y Provincia de Monte Plata.
Sin embargo, Olson advierte que urge regular el comercio de moringa, además de impulsar la investigación científica para comprobar su efectividad medicinal, además de su incuestionable valor nutritivo.
“Se vende en pastillas que carecen de valor nutritivo. No hacen daño, pero tampoco aportan nada (…) Su valor nutritivo está ampliamente comprobado. Sin embargo, en cuanto a su valor en el tratamiento de cáncer, diabetes e hipertensión en humanos aún no existe respaldo de pruebas clínicas”, se lee en el artículo.
