La Policía Nacional investiga un caso de violación grupal En Salinas, provincia de Santa Elena. La víctima, una madre de 45 años, habría sido secuestrada por un taxista, que la llevó a un descampado donde aguardaba un grupo ocho hombres.
Según la familia, la mujer subió al taxi el lunes tras visitar a una amiga en la parroquia José Luis Tamayo. Le solicitó al conductor que la llevara a su hogar, pero este se desvió de la ruta y la llevó a una zona desolada, donde fue drogada y violada por los nueve sujetos.
La familia dijo a la prensa que los agresores cortaron la zona púbica de la madre con un objeto afilado.
Tras la agresión, el taxista dejó a la víctima en las inmediaciones de la escuela Técnico Muey.
La víctima fue trasladada al hospital José Garcés Rodríguez, del cantón Salinas. El caso está bajo investigación.
En enero de 2017, Ecuador fue escenario de otra violación grupal que causó consternación en todo el país. La víctima, de 35 años, fue atacada en un bar-restaurante ubicado en la avenida De los Shyris, en Quito. La joven acudió como invitada a un fiesta de cumpleaños del copropietario del establecimiento, que no estaba abierto al público ese fin de semana.
La víctima se quedó sola con tres hombres, incluyendo dos de sus amigos, que son hermanos, mientras que el dueño del restaurante y otras dos mujeres salieron para comprar comida. Fue en ese lapso cuando ocurrió la agresión sexual, dijo la policía.
Noticias
Según los fiscales, la joven habría sido drogada con algún tipo de psicotrópico y violada por los tres sujetos, identificados como Juan Andrés M., y los hermanos Jhon Alexander C. y Danny Paúl C.
El dueño del negocio y las otras invitadas encontraron mal herida y ensangrentada a la víctima al regresar al restaurante. Los testigos declararon a la policía que había manchas de sangre en “todas partes”.
La mujer habría sido violada un palo de billar, una botella de cerveza y posiblemente con un vaso. Los testigos dijeron que había restos de sangre en ambos extremos del palo de billar y en la ropa de los sospechosos.
La sangre de la joven también habría sido hallada en la mesa de billar y en otros sitios del establecimiento, según las autoridades.
Fabrizzio Mena, abogado defensor de la víctima, sostuvo que la joven fue violada por los sospechosos, quienes además usaron los objetos mencionados por los testigos.
Según la defensa, uno de los acusado habría tomados fotos y videos del horrendo ataque, evidencia que los oficiales de policía descubrieron cuando el acusado pidió llamar a su familia y entregó la contraseña del dispositivo.
