Una agente de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) con solo dos meses en el trabajo escuchó los gritos de ayuda de una madre y saltó sobre una cinta transportadora en el Aeropuerto Internacional Newark Liberty para salvar a su bebé que se estaba atragantando, informó la agencia.
Según las autoridades, la madre recogió a su hijo de 2 meses de su portabebé para llevarlo a través del control de seguridad y notó que no respiraba.
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Se volvió frenéticamente hacia otros viajeros en la fila y gritó pidiendo ayuda cuando no pudo lograr que su bebé respondiera.
Cecilia Morales, una residente de Newark que se unió a la TSA a finales de octubre, entró en acción. Aunque su tiempo con la TSA ha sido breve, Morales es una EMT capacitada con 10 años de experiencia en varios pueblos del norte de Nueva Jersey.
Morales le gritó instrucciones a la madre en un esfuerzo por ayudarle a revivir al niño, luego se dio cuenta de que la madre estaba demasiado asustada para enfocarse en la tarea.
"Sabía que si no llegaba allí, no iba a ser un buen resultado", dijo Morales. "Salté sobre los rodillos de la cinta transportadora del puesto de control y ella me dio al bebé. Le realicé la maniobra de Heimlich para bebés".
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Morales dice que sostuvo al bebé con cuidado para mantener abiertas sus vías respiratorias, luego lo colocó boca abajo en su brazo y le dio una palmada en la espalda. Ninguna respuesta.
Ella lo intentó de nuevo. Luego empezó a respirar.
Morales también llevó al bebé a través del detector de metales, con la madre en "estado de shock", y esperó a que llegara el EMT pediátrico poco tiempo después con algo de oxígeno para el bebé. Todo fue grabado en video.
“Vi el video después”, dijo Morales. “Fue la primera vez que me vi a mí misma en acción, salvando una vida. Fue alucinante de ver. Sentí que mi entrenamiento y experiencia se apoderaron de mí".
Esta fue la primera vez que realizó la maniobra de Heimlich en un bebé, aunque lo había hecho en adultos y niños antes como EMT.
El director de seguridad federal de la TSA para Nueva Jersey, Thomas Carter, calificó a la nueva empleada como una "salvadora de vidas" y calificó sus acciones de "inspiradoras".
Ayrana Frazier, gerente de la TSA, estuvo de acuerdo.
"Si la oficial Morales no hubiera utilizado su pensamiento crítico, conocimiento y respuesta rápida, tal vez podríamos haber tenido un resultado terrible", dijo Frazier. "En ese momento, la oficial Morales era desinteresada y su prioridad era salvar una vida. Estoy orgullosa de llamarla una de los nuestros".
