WASHINGTON DC - Los principales funcionarios de salud de la nación dijeron el miércoles que EEUU se está acercando al punto en que el COVID-19 ya no es una "crisis constante" a medida que más ciudades, empresas y lugares deportivos comenzaron a levantar las restricciones pandémicas en todo el país.
La directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), la Dra. Rochelle Walensky, dijo durante una sesión informativa en la Casa Blanca que el gobierno está contemplando un cambio en su guía de mascarillas en las próximas semanas. Al señalar las recientes disminuciones en los casos de COVID-19, los ingresos hospitalarios y las muertes, reconoció que “la gente está muy ansiosa” por que los funcionarios de salud alivien las reglas de uso de mascarillas y otras medidas diseñadas para detener la propagación del coronavirus.
“Todos compartimos el mismo objetivo: llegar a un punto en el que el COVID-19 ya no interrumpa nuestra vida diaria, un momento en el que no sea una crisis constante, sino algo que podamos prevenir, proteger y tratar”. dijo Walenski.
Con la disminución de la variante Ómicron y los estadounidenses ansiosos por ir más allá del virus, los líderes gubernamentales y empresariales se han adelantado a los CDC al poner fin a las medidas contra el virus en la última semana, incluida la orden de que los trabajadores regresen a las oficinas, la eliminación de los mandatos de mascarilla y ya no requieren prueba de vacuna para entrar en restaurantes, bares y estadios deportivos y de entretenimiento.
Los esfuerzos han ido ganando más fuerza cada día.
Los funcionarios de Filadelfia dijeron el miércoles que el mandato de vacunas de la ciudad para los restaurantes se levantó de inmediato, aunque los mandatos de mascarillas para interiores siguen vigentes por ahora. En Disney World, los visitantes vacunados ya no tendrán que usar mascarillas en el parque temático de Florida a partir del jueves. Los equipos deportivos profesionales, incluidos Utah Jazz y Washington Wizards and Capitals, han dejado de exigir pruebas de vacunas para los fanáticos.
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El condado más poblado de Washington, donde se encuentra Seattle, anunció el miércoles que ya no requerirá controles de vacunación de COVID-19 para ingresar a restaurantes, bares, teatros y gimnasios a partir del 1 de marzo.
La comisionada de salud, Cheryl Bettigole, dijo que el recuento diario promedio de casos de Filadelfia se había reducido a 189 casos por día en la ciudad de más de 1.5 millones de personas. Bettigole dijo que la caída de las infecciones ha sido más pronunciada en Filadelfia que en cualquier otro lugar del estado o del país, lo que facilita el levantamiento del mandato de vacunas para restaurantes y otros negocios anunciado a mediados de diciembre y que entró en vigencia por completo este mes.
“Nuestro objetivo siempre ha sido lo menos restrictivo posible y al mismo tiempo garantizar la seguridad”, dijo.
En Provincetown, Massachusetts, una ciudad costera que se convirtió en un punto crítico de COVID-19 con un brote temprano de la variante Delta el verano pasado, los funcionarios levantaron el martes el mandato de mascarilla y el requisito de vacunas para espacios interiores como restaurantes y bares. El administrador de la ciudad, Alex Morse, dijo que la comunidad de aproximadamente 3,000 personas registró cero casos activos la semana pasada entre los residentes de Provincetown, algo que no ha sucedido desde el aumento que siguió a las celebraciones del 4 de julio del año pasado.
“Estamos aprendiendo a vivir y mitigar el impacto del virus en nuestra comunidad”, dijo Morse.
Las infecciones y hospitalizaciones por COVID-19 han disminuido drásticamente en EEUU, y el promedio móvil de siete días de nuevos casos diarios cayó de aproximadamente 453,000 hace dos semanas a aproximadamente 136,000 el martes, según datos de la Universidad Johns Hopkins. Las hospitalizaciones están en niveles similares a los de septiembre, cuando EEUU estaba saliendo del aumento de la variante Delta. Casi el 65% de los estadounidenses están completamente vacunados.
“Como resultado de todo este progreso y las herramientas que tenemos ahora, nos estamos moviendo hacia un momento en el que el COVID-19 no es una crisis, sino algo contra lo que podemos protegernos y tratar”, dijo Jeff Zients, coordinador de respuesta al coronavirus de la Casa Blanca.
Walensky dijo que los CDC “pronto implementarán una guía que sea relevante y aliente las medidas de prevención cuando más se necesiten para proteger la salud pública y nuestros hospitales”. Ella sugirió que cualquier cambio tendrá en cuenta las medidas de transmisión comunitaria, así como las tasas de hospitalización u otros indicadores de si las personas infectadas se enferman gravemente. También considerarían el espacio disponible para camas en los hospitales.
Varios estados con mandatos de mascarillas para interiores anunciaron la semana pasada que se levantarían en las próximas semanas, y también citaron números prometedores.
Dos festivales de música que atraen a miles de personas a la ciudad de Indio en el desierto de California en abril y mayo, Coachella y Stagecoach, también dijeron esta semana que no habrá mandatos de vacunación, enmascaramiento o pruebas de acuerdo con las pautas locales. Coachella también señaló que eso podría cambiar junto con las condiciones de COVID.
En Filadelfia, Bettigole dijo que el mandato de la vacuna ayudó a impulsar un aumento "muy grande" en las vacunas pediátricas, lo que llevó a la ciudad muy por delante del promedio nacional para las primeras dosis entre los niños de 5 a 11 años. Más del 53% de los residentes de Filadelfia en ese grupo de edad han recibido una primera dosis, en comparación con cerca del 30% a nivel nacional, dijo.
No todas las empresas planean cambiar de rumbo inmediatamente.
El bar y restaurante deportivo irlandés O'Neals seguirá pidiendo ver las tarjetas de vacunación de los clientes por ahora, dijo el socio gerente Greg "Spoonie" Rand, a pesar de que la ciudad está levantando su mandato de vacunación.
“Los invitados son más obedientes y los empleados están más contentos de que sigamos haciendo tarjetas de vacunas adentro”, dijo. Él cree que las personas vacunadas tendrán cuidado de entrar si el pub deja de revisar las tarjetas.
Walensky dijo que los CDC quieren “dar a las personas un descanso de cosas como el uso de mascarillas” cuando las circunstancias mejoren, aunque poder volver a enmascararse si las cosas empeoran. También dijo que habrá casos en los que las personas deberían continuar usando máscaras incluso si las medidas de prevención disminuyen. Los ejemplos incluyen cuando las personas tienen síntomas de COVID-19 o están dentro de los 10 días posteriores al diagnóstico.