Una comunidad de Nueva York pide que se frene la deportación de un padre de origen mexicano que ha vivido en este país por tres décadas.
Armando Rojas, no cuenta con un historial criminal y sus dos hijos son ciudadanos americanos. Sin embargo, todo lo que ha construido con su familia en Mt. Kisco ahora está en peligro.
Miembros de la sinagoga en la que Rojas trabajo por décadas han hecho hasta lo imposible para luchar por el.
Rojas fue arrestado por autoridades migratorias el 14 de marzo de este año. Catorce días después fue deportado a México.
No obstante su hijo y miembros de esta congregación fueron por él y se presentaron en la frontera entre Estados Unidos y México - una vez ahí solicitaron asilo político.
Desde entonces ha estado encarcelado- esperando una decisión en su caso.
Esta semana se un juez de inmigración le negó su petición de asilo. Y lo único que le resta ahora es apelar su caso.
