NUEVA YORK – Los amantes del esquí y del snowboard podrán disfrutar de estos deportes durante el invierno en Nueva York. Y es que el gobernador Andrew Cuomo dio a conocer el domingo que las estaciones de esquí en el estado podrán reabrir desde el 6 de noviembre, pero con un 50 por ciento de capacidad en interiores.
Además, las personas tendrán que utilizar sus mascarillas todo el tiempo menos cuando estén comiendo, tomando alguna bebida o esquiando; tomar las medidas de distanciamiento físico; los elevadores o góndolas solo pueden ser compartidos con personas del mismo círculo; las lecciones para esquiar estarán limitadas a un máximo de 10 personas; los lugares tendrán que tomar las medidas de desinfección y limpieza en los equipos para rentar; y disminuir la capacidad en la montaña durante los días pico o cuando están cerradas varias pistas a un 25 por ciento.
"A partir del próximo mes, las estaciones de esquí podrán reabrir con una capacidad interior limitada, lo que permitirá a los neoyorquinos tener alguna actividad al aire libre este invierno sin tener que ponerse en cuarentena cuando regresen", señaló el gobernador durante su conferencia.
Cuomo también informó que las tazas de positividad por COVID-19 en las zonas categorizadas como calientes o rojas es de 3.19 por ciento a diferencia del día anterior que fue de 4.39 por ciento, y en las zonas fuera de estas áreas es de 1 por ciento. Asimismo, dijo que desafortunadamente el sábado fallecieron 7 personas por la enfermedad.
"Los científicos nos han dicho que el COVID-19 se volverá más agresivo durante el otoño, pero nuestra estrategia en las zonas críticas es inteligente, impulsada por datos y menos disruptiva para ayudarnos esta temporada. Y hasta ahora, los datos muestran que la estrategia está funcionando para reducir las tasas de infección en nuestras áreas de la zona roja ", dijo el gobernador Cuomo.
