BOSTON - Un rostro familiar regresó al banquillo de los Spurs, y San Antonio consiguió el resultado habitual.
En el regreso del entrenador Gregg Popovich, quien se ausentó durante dos partidos, los campeones defensores de la NBA arrollaron el domingo 111-89 a los Celtics de Boston para hilvanar su séptima victoria consecutiva.
"Nos sentimos más cómodos cuando él está al mando", dijo el alero Tim Duncan. "Fue bueno tenerlo ahí y escuchar su voz".
Popovich regresó para dirigir al equipo tras someterse a un procedimiento médico menor no revelado. El duelo en Boston fue el primero de una serie de cuatro como visitante.
Los Spurs ganaron los dos partidos bajo la dirección del asistente Ettore Messina: a los Pacers de Indiana 106-100 el miércoles y a los Kings de Sacramento 112-104 el viernes.
Popovich se mostró contento por dirigir de nuevo, especialmente en un partido en que San Antonio aplastó 66-40 a los Celtics en la segunda mitad, luego de verse en desventaja por 49-45.
"No sé a qué otra cosa podría dedicarme", comentó.
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Danny Green encabezó a San Antonio con 18 puntos. Arriba 80-77 con 10 minutos por jugar, los Spurs se despegaron definitivamente con una ofensiva 14-2 que les dejó al frente 94-79 con 6:11 restantes.
Boris Diaw añadió 15 puntos y Tim Duncan aportó 14 para los Spurs. El argentino Manu Ginóbili colaboró con siete puntos y dos asistencias.
Jeff Green lideró a los Celtics con 16 puntos. Boston ha perdido siete de sus últimos ocho partidos. Rajon Rondo apenas anotó dos puntos y falló los dos tiros libres que cobró. Rondo ha acertado sólo nueve de 30 tiros libres en la temporada.
"Siempre disfruto de venir a Boston", comentó Popovich antes del juego del domingo. "Siempre una buena cena la noche anterior al partido. Ojalá pudiéramos quedarnos después".
El entrenador dijo que vio los partidos por televisión durante su ausencia pero sin gritar a la pantalla.
"Soy un poco más maduro que como para hacer eso", afirmó. "Lo dejo para cuando estoy dirigiendo".
La racha de los Warriors es incluso mejor que la de San Antonio.
Draymond Green anotó 20 puntos y Stephen Curry agregó 16, además de repartir 10 asistencias, para que los Warriors de Golden State vencieran 104-93 a los Pistons de Detroit y alcanzaran su noveno triunfo en fila.
"Siempre que vengo a casa y juego como lo hice hoy es maravilloso", comentó Green, quien jugó en la Universidad de Michigan State. "Mis compañeros me dieron el balón cuando tenía huecos para disparar durante todo el partido. Dependía de mí encestarlos, pero ellos no pudieron haberme puesto en mejores situaciones".
Marreese Speights agregó 11 tantos y 12 rebotes por los Warriors (14-2).
Los Pistons (3-14) han perdido ocho al hilo, la racha más larga en la carrera de Stan Van Gundy como entrenador. El estratega nunca había tenido una peor foja, de 11 partidos por debajo de .500.
Kentavious Caldwell Pope lideró a Detroit con 23 puntos.
Van Gundy deshizo su alineación habitual de tres postes ante los Warriors, un plantel de menos estatura. Colocó a Kyle Singler como alero y utilizó a Greg Monroe desde el banquillo.
No funcionó. Monroe, Andre Drummond y Josh Smith se combinaron para encestar 12 de 38 disparos.
Por los Warriors, el brasileño Leandro Barbosa terminó con ocho puntos en 13 minutos de acción.
En otros encuentros, los Grizzlies de Memphis vencieron 97-85 a los Kings de Sacramento, para colocar su foja en 15-2, la mejor de la NBA; el Heat de Miami venció 86-79 a los Knicks de Nueva York, con 27 puntos de Dwyane Wade; el Magic de Orlando superó 93-90 a los Suns de Phoenix y dejó atrás una seguidilla de cuatro derrotas.
Además, los Bulls de Chicago doblegaron 102-84 a los Nets de Brooklyn, mientras que los Lakers de Los Ángeles vencieron por 129-122 a los Raptors de Toronto en tiempo extra.
