La noche del 27 de febrero de 1844, un grupo de jóvenes disidentes protagonizó uno de los capítulos más memorables de la historia dominicana al disparar un trabucazo contra la legendaria Puerta de la Misericordia, en Santo Domingo.
Esa fue la señal que encendió la llama de la independencia nacional y el llamado para izar la bandera dominicana con su leyenda ¡Dios, Patria y Libertad! y para tomar por asalto la Fortaleza Ozama, cuartel de las tropas de ocupación haitiana.
Pero ¿qué es un trabucazo? La Real Academia de la Lengua Española lo define como el disparo del trabuco. Y el trabuco es un arma de fuego más corta y de mayor calibre que la escopeta ordinaria.
Tanto el trabuco como el arcabuz eran armas comunes de la artillería española durante la conquista y la época colonial. Ambas se caracterizaban por su escaso alcance y precisión, aunque el arcabuz fue mucho más popular entre los ejércitos que colonizaron América.
El trabuco se caracterizaba por su boca ensanchada o acampanada y una longitud promedio de 60 centímetros. El arma se cargaba por la boca del cañón (avancarga) y utilizaba balas de plomo o perdigones.
Pero el episodio memorable de 1844 que se conmemora el 27 de febrero no fue siquiera la primera independencia de República Dominicana, pues en 1821 el país acabó con más de tres siglos de dominación española.
Los dominicanos no conmemoran esa primera independencia por su fugacidad, puesto que dos meses después pasó a llamarse Estado Independiente de Haití Español.
República Dominicana
El país vecino ocupó en 1822 el territorio recién independizado y gobernó a la población dominicana durante más de dos décadas. La isla unificada de La Española se adjudicó las propiedades de los españoles peninsulares y de la Iglesia católica para distribuirlas entre los hombres libres, un coto de la población que terminó reprimido por el Estado haitiano, incluso el idioma español se vio amenazado.
La ocupación haitiana de 1822 a 1844, que marcó el primero de los capítulos en la historia de disputas fronterizas entre ambos países caribeños, trastocó los intereses de las cupulas del poder español y las imposiciones y restricciones del Ejecutivo avivaron el descontento del pueblo dominicano.
LA TRINITARIA, AUTORA DEL LEGENDARIO TRABUCAZO
Fue en 1838 cuando un grupo de jóvenes de Santo Domingo fundó la sociedad secreta La Trinitaria, pilar de la resistencia dominicana en busca de la independencia de Haití.
El movimiento independista estalló a inicios de 1843 y se extendió con rapidez por todo el sur del país. Un año después, los dirigentes de La Trinitaria planearon la toma definitiva de la amurallada ciudad de Santo Domingo.
Fue así como el 27 de febrero el brillante estratega militar Matías Ramón Mella, considerado uno de los Padres de la Patria junto a Juan Pablo Duarte y Francisco del Rosario Sánchez, llegó hasta la Puerta de la Misericordia y disparó el conocido "Trabucazo de la Independencia".
El estruendo fue antesala del izado de la bandera dominicana al grito de guerra de "¡Dios, Patria y Libertad!", una consigna que prevalece en el país criollo.
TRABUCAZO 2020, APOLOGÍA DE LA DEMOCRACIA DOMINICANA
Así como un grupo de jóvenes de Santo Domingo fueron los protagonistas del capitulo más memorable de la historia dominicana ese 27 de febrero de 1844, 176 años después una nueva generación de jóvenes disidentes aprovecha el simbolismo del trabucazo para reafirmar su compromiso social y político y cuestionar a las cupulas del Gobierno dominicano y a sus instituciones tras los fallidos comicios municipales del 16 de febrero.
Para estos jóvenes transgresores, el Trabucazo 2020 representa un nuevo izado de la bandera dominicana, ansiosos de una reforma política y social que corte de tajo con los partidos políticos anquilosado en el poder.
Y a este llamado que tuvo como cuna la Plaza de la Bandera acudirán varias celebridades dominicanas y caribeñas que, junto con el pueblo dominicano, claman transparencia y democracia.