CENTENNIAL- La fiscalía en el juicio contra el autor del tiroteo en un cine de Aurora concluyó la presentación de su caso contra el acusado James Holmes.
El equipo de la fiscalía intentó socavar la afirmación de Holmes que estaba enfermo mentalmente y no podía diferenciar el bien del mal cuando mató a 12 personas e hirió a 70. Los fiscales confiaron en el testimonio emocional de decenas de sobrevivientes, junto con fotos gráficas y las propias declaraciones grabadas en video de Holmes cuando habló con un psiquiatra del estado.
El viernes, los fiscales convocaron a Ashley Moser, una de las personas heridas de gravedad. Moser sufrió un aborto involuntario después del tiroteo y quedó paralizada. Su hija de 6 años de edad, Veronica, murió en el ataque.
Moser llegó al banquillo de los testigos en una silla de ruedas motorizada. Describió donde se encontraba y que hizo cuando escucho lo que ella pensó eran fuegos artificiales. Dijo que se paró, tomó la mano de su hija y fue cuando sintió un disparo en el pecho. La mano de su pequeña “se deslizó” y las dos cayeron al piso, dijo.
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Uno de los momentos más emotivos de su testimonio fue cuando la fiscalía mostró la foto de Veronica y el fiscal George Brauchler le preguntó quién era.
“Es Veronica”, dijo entre lágrimas.
Los fiscales trataron de tejer una historia poderosa mezclando recuerdos dramáticos de las víctimas con el testimonio técnico. Distribuidores de armas e investigadores describieron cómo Holmes gastó miles de dólares para amasar un arsenal de armas de fuego, municiones, chalecos antibalas y suficientes productos químicos para hacer explotar su apartamento.
Los abogados de Holmes ahora empezarán a llamar a sus propios psiquiatras y presentar otras pruebas para argumentar que Holmes estaba en las garras de un episodio psicótico al momento del ataque y debe ser declarado no culpable por razones de demencia. Ellos planean comenzar su caso el jueves.
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Holmes se declaró no culpable por razones de demencia. La fiscalía está buscando la pena de muerte.
Durante el juicio, el juez descartó a cinco jurados por varios motivos e instruyó a los 19 jurados de mantenerse lejos de cualquier conversación o reporte acerca del juicio que empezó el 27 de abril.