NUEVA YORK - La ciudad de Nueva York estaría a punto de quedarse sin pruebas COVID-19 e instan a los proveedores médicos a continuar evaluando solo a los pacientes que están gravemente enfermos, dijo el Departamento de Salud de la ciudad en un memorando a los proveedores de atención médica.
"A medida que los suministros para las pruebas continúan disminuyendo, existe una posibilidad real de que se agoten por completo en los hospitales", dijo la alerta de salud el 11 de abril. "En este momento, proveedores deberían solo realizar las pruebas a los pacientes hospitalizados para preservar los recursos necesarios para diagnosticar y manejar adecuadamente a los pacientes con enfermedades más graves".
La advertencia se produjo en medio de repetidas súplicas de la ciudad de Nueva York y funcionarios estatales para que el gobierno federal proporcione pruebas generalizadas para pasar a una fase de contención en el brote de coronavirus.
"No podemos hacer que la transición vuelva a la normalidad sin realizar pruebas a una escala mucho mayor", dijo el alcalde Bill de Blasio el lunes en MSNBC.
Hasta el domingo por la tarde, 462,000 personas en Nueva York han sido examinadas para detectar el virus, según cifras estatales. De ellos, casi 189,000 habían dado positivo.
Debido al racionamiento, solo el 44% de las pruebas realizadas en el estado se han realizado en la ciudad de Nueva York, a pesar de que la ciudad representa el 74% de las muertes del estado por el virus.
La falta de capacidad de pruebas, en parte debido al racionamiento de los equipos de protección personal para las personas que tendrían que administrarlos, también ha impedido que los funcionarios realicen pruebas generalizadas del personal de hospitales y centros de ancianos.
