Impera la incertidumbre en la República Dominicana tras la suspensión de las elecciones municipales. La pregunta ahora es si la Junta Central Electoral será capaz de reanudar los comicios con inmediatez para así ciumplir con lo requerido por la Constitución.
La Carta Magna establece que los aspirantes electos en los comicios municipales deberán asumir sus cargos el 24 de abril, cuando culminan sus períodos de servicio los funcionarios elegidos en 2016.
La ley aprobada por la Asamblea Nacional en 2010 dicta que las autoridades municipales electas el tercer domingo de febrero de cada cuatro años deberán asumir sus cargos el 24 de abril del mismo año; sin embargo en caso de anulación, el artículo 261 de la Ley Orgánica de Régimen Electoral ordena que los comicios se concreten dentro de los 30 días siguientes, lo que significa que la nación caribeña tendría sus elecciones municipales antes del próximo 17 de marzo.
El Tribunal Superior Electoral debe confirmar la anulación irrevocable de las elecciones para que la la JCE pueda proceder con una nueva elección, según la Ley Orgánica de Régimen Electoral.
“Una vez que haya llegado a ser irrevocable el fallo por el cual se anule una elección, ya sea por no haberse interpuesto apelación cuando emane de una junta electoral, o por haber sido confirmado dicho fallo por el Tribunal Superior Electoral, este dispondrá que vuelva a efectuarse la elección en el colegio o los colegios en los cuales hubiere sido anulada, en la fecha que al efecto señale por la correspondiente proclama de convocatoria, y que deberá estar comprendida dentro de los treinta (30) días siguientes”, se lee en el artículo 261.
Sin embargo, según los analistas citados por nuestra cadena aliada CDN, el lenguaje de la ley se refiere a los 30 días como el plazo para anunciar nuevos comicios, no para concretarlos. Será la JCE la que tome la decisión final.
