Gobierno alista medidas ante llegada de caravana

Son cientos de migrantes que entre sus pasos guardan el anhelo de dejar atrás la violencia en su país, Honduras, para llegar al norte del continente y comenzar desde cero. 

"Nosotros no venimos a molestar a México", asegura José Sorto.

La caravana está conformada por unas 2,000 personas que salieron de San Pedro Sula, Honduras, con destino a Estados Unidos para buscar, dicen, el sueño americano. 

El gobierno mexicano puntualizó en un comunicado que permitirá el ingreso solo a las personas que cuenten con los documentos necesarios, pero esta postura no fue bien tomada por las organizaciones que protegen a los migrantes. 

"Si no fuera por el gran número que son, han tratado de reprimirlos siguiendo la política de Estados Unidos", asegura Irineo, de la organización Migrantes sin Fronteras.

Mientras ellos avanzan por Guatemala, en la frontera sur de México ya los espera la Policía Federal y personal del Instituto Nacional de Migración. 

"Se privilegiará a los que cumplan con requisitos de ingreso y estamos tratando de generar condiciones para que se haga de manera fluida y eficaz", dice Manelich Castilla Craviotto, comisionado de la Policía Federal.

Paradójicamente, el gobernador de Chiapas, lugar al que llega la caravana, ofreció libre tránsito por la entidad.

"Nosotros tenemos una política de absoluto respeto a los migrantes, de puertas abiertas, porque tenemos que tener la cara limpia para exigir el mismo trato para nuestros connacionales que viven en Eestados Unidos", explica Manuel Velasco.  

Eunice Rendón trabaja de cerca con los grupos de tránsito y considera que, en esta ocasión, existe mucha presión del gobierno de Estados Unidos. 

"Sí estamos viendo una actitud distinta de un gobierno mexicano más metido en la zona sur”, dice Rendón.

El gobierno de Chiapas informó que ya están listos siete albergues para recibir a hombres, mujeres y niños que huyen de su país.

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