Lo que debes saber
- Tres personas enfrentan cargos después de que la policía pasara casi cinco horas poniendo fin a una fiesta en una residencia en Jackson Township el domingo, dijo el departamento de la policía local.
- La policía contactó al dueño de la casa, quien supuestamente le dijo a los oficiales que había alquilado la residencia en AirBnB y que estaba organizando una gran fiesta. El propietario abandonó el área cuando aproximadamente 200 personas adicionales llegaron a la residencia y la fiesta comenzó a expandirse, dijo la policía.
- A medida que continuaron llegando personas, la multitud en la residencia creció a más de 700 personas. Todos los oficiales de policía de Jackson Township en servicio respondieron cuando se cerraron las carreteras hacia el vecindario porque aún estaban llegando más asistentes a la fiesta, dijo la policía. El municipio también contó con la ayuda adicional de varios departamentos de policía cercanos para ayudar controlar la cantidad de asistentes.
NUEVA JERSEY -- Tres personas enfrentan cargos después de que la policía pasara casi cinco horas poniendo fin a una fiesta en una residencia en Jackson Township el domingo, dijo el departamento de la policía local.
El domingo, alrededor de las 8:30 p.m., oficiales respondieron a una residencia ubicada en Mill Pond Road en el vecindario de Whispering Hill tras un reporte de un incidente sospechoso. Cuando llegaron, los oficiales hablaron con numerosos residentes que afirmaron que se había alquilado una casa en la calle a un grupo que estaba teniendo una fiesta grande que estaba causando disturbios y que también parecía estar violando la orden ejecutiva del gobernador Phil Murphy sobre el número de personas reunidas.
Según la policía del municipio de Jackson, los oficiales monitorearon el área y observaron una gran multitud en la residencia. Posteriormente, la policía contactó al dueño de la casa, quien supuestamente le dijo a los oficiales que había alquilado la residencia en AirBnB y que estaba organizando una gran fiesta. El propietario abandonó el área cuando aproximadamente 200 personas adicionales llegaron a la residencia y la fiesta comenzó a expandirse, dijo la policía.
A medida que continuaron llegando personas, la multitud en la residencia creció a más de 700 personas con más de 100 vehículos estacionados en el área cuando la policía comenzó a recibir llamadas al 911 de otros propietarios que reportaron disturbios y allanamientos, dijo la policía.
A medida que la multitud crecía, todos los oficiales de policía de Jackson Township en servicio respondieron cuando se cerraron las carreteras hacia el vecindario porque aún estaban llegando más asistentes a la fiesta, dijo la policía, agregando que los oficiales del Departamento de Policía de Freehold, Departamento de Policía de Howell, Departamento de Policía de Lakewood, la Fiscalía del Condado de Ocean, Departamento del Sheriff del Condado de Ocean y la Policía Estatal de Nueva Jersey también respondieron para ayudar y despejar a la gran multitud de la residencia y dirigir el tráfico a medida que las personas abandonaban el área.
Durante este tiempo, el departamento recibió una llamada al 911 de un residente de Overlook Drive informando que las personas que habían abandonado la fiesta de Mill Pond Road habían irrumpido en su residencia y estaban dañando la propiedad, dijo la policía, agregando que un miembro de la familia de la persona que llamó originalmente que había una supuestamente había invitado a un gran grupo de la fiesta a la residencia. Oficiales adicionales respondieron y el grupo se dispersó de esta segunda residencia.
Los oficiales tardaron hasta aproximadamente la 1 a.m. para deshacerse de los asistentes y todos los vehículos en el vecindario sin más incidentes.
El propietario, identificado como Yaakov Weiss, de 40 años y de Jackson, y las organizadoras de la fiesta Patience Guanue, de 23 años, y Alicia Hinneh, de 22 años, ambas de Newark, recibieron citaciones por violar la Orden Ejecutiva del Gobernador, según la policía.
La información del abogado para el propietario y las organizadoras no se supo de inmediato.
Durante semanas, Murphy le ha estado recordando al público que evite las fiestas y las reuniones sociales masivas en un esfuerzo por detener la propagación del coronavirus.
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Durante su rueda de prensa el lunes sobre el coronavirus, Murphy comentó frustrantemente sobre la fiesta: "Por cierto, también ponen en riesgo la salud de la policía".
Murphy también continuó diciendo que, dado que el estado no permite que los bares o los comedores interiores se vuelvan a abrir por el momento, estas reuniones "clandestinas" se están llevando a cabo.
"Estas son abrumadoramente reuniones de jóvenes … pero existe una gran preocupación de que una persona joven pueda [contagiarse] e irse a casa o ir a visitar a la abuela y al abuelo y transmitir esto", dijo Murphy, agregando que si uno va a reunirse, que se reunan afuera, cumpliendo con las normas de distanciamiento social y el uso de máscaras.
El coronel Pat Callahan, de la policía estatal de Nueva Jersey, compartió opiniones similares.
"Creo que el hecho de que los bares y [la cena] en los restaurantes estén cerrados, crea esta "situación clandestina" que ciertamente no es la que queremos, porque... los jóvenes, incluso si son asintomáticos y son positivos, el hecho de que puedan transmitir eso a su familiar es sin duda algo que nos preocupa", dijo Callahan.
Esta no es la primera instancia de fiestas masivas con cientos de asistentes en Nueva Jersey.
Tres personas también enfrentan cargos por una fiesta de 400 personas que terminó con dos policías atropellados por un automóvil que huía la semana pasada.
También se han reportado grandes reuniones en Nueva York. Estas escenas han llevado al gobernador Andrew Cuomo a amenazar con retroceder la reapertura del estado.
