Sentencian a acusados por asesinato de Emely Peguero

Desgarrador final de juicio de Emely Peguero.

NUEVA YORK - Un año y dos meses tras la trágica muerte de la adolescente embarazada Emely Peguero, finalmente se dio a conocer la esperada sentencia contra los acusados en el caso, Marlon Martínez y su madre Marlin Martínez.

Marlon fue condenado a 30 años de cárcel, mientras que su madre Marlin recibió una pena de 5 años tras las rejas. 

El dolor y la rabia carcomen el corazón de Cenoví, la pequeña comunidad en la provincia de San Francisco de Macorís en la que creció Emely Peguero, una adolescente que soñaba con ser abogada y defender a las mujeres de la República Dominicana de la violencia machista, pero fue este flagelo el que terminó por arrebatarle la vida.
Emely tenía 16 años y cinco meses de embarazo cuando fue salvajemente asesinada. Su cuerpo fue encontrado dentro de una maleta al costado de una brecha agreste. El principal sospechoso es su novio, Marlon Martínez, que junto con su madre Marlin Martínez, quien era una prominente funcionaria del gobierno dominicano, habría conspirado para borrar su presunta participación en uno de los más escalofriantes crímenes en el país caribeño.
El miércoles 23 de agosto de 2017, Emely salió a las 8:30 a.m. de su hogar en la localidad de Cenoví, al noreste de la isla. Su novio Marlon Martínez la habría llevado a una clínica de obstetricia para recoger los resultados de unos análisis.
Según las autoridades, esa mañana Marlon presuntamente asesinó a la joven y luego tiró su cuerpo desde el puente Colón, en Cenoví. Martínez, de entonces 19 años, llamó a su madre para planear la desaparición del cuerpo, según Bolívar Sánchez, funcionario de la Procuraduría General de la República.
Marlon aseguró a la familia Peguero Polanco que dejó a la adolescente en una gasolinera, pero la madre revisó las cámaras de seguridad sin encontrar rastro de su hija, así que alertó a la uniformada y comenzó la búsqueda desesperada.
El jueves 24 de agosto de 2017, Adalgisa Polanco, madre de Emely, declaró a la prensa que sospechaba de Marlon y de su madre. “Que me devuelvan a mi niña, tiene cinco meses de embarazo”, suplicó la afligida mujer. “Se la llevaron a abortar”.
Más tarde, Marlon y su madre Marlin Martínez se defendieron en na entrevista televisiva; sin embargo, tras caer en contradicciones, el joven de entonces 19 años fue detenido.
Al analizar registros de geolocalización del teléfono de Emely, las autoridades dominicanas ejecutaron un operativo en el apartamento que compartía Marlon con su madre. Los investigadores descubrieron un colchón y toallas ensangrentadas, lo que reforzó la hipótesis de que a la joven se le provocó un aborto.
Kelvin Jiménez, un empleado de seguridad del exclusivo edificio de los Martínez, relató a la prensa que vio a Marlon deshacerse del cuerpo de la joven.
El miércoles 30 de agosto de 2017, Marlon confesó el asesinato y dijo que el cadáver fue depositado en un basurero del área. Las autoridades no hallaron los restos de la joven en el lugar referido.
El clamor de justicia estalló y los residentes de Cenoví realizaron varias protestas para presionar a los fiscales. Mientras tanto, Eugenio Peguero, hermano de Emely, habría recibido mensajes de WhatsApp en el que testigos afirmaban haber hallado un cadáver dentro de una maleta.
Fue el viernes 1 de septiembre de 2017 cuando el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) informó el hallazgo del cadáver de Emely, con los restos del feto. El forense dijo que el útero de la joven fue perforado y que sufrió un golpe contundente en la cabeza que le hundió el cráneo.
A un año del horrendo asesinato, la familia Peguero Polanco sigue a la espera de justicia. Está previsto que el juicio de fondo inicie este miércoles 29 de agosto a las 9:00 a.m. Las magistradas estimen que habrá condena antes de que culmine el año.
“Que me devuelvan a mi niña, tiene cinco meses de embarazo”, suplicó la madre de Emely. “Se la llevaron a abortar”.
La sed de justicia impera en la comunidad de Cenoví a un año del crimen que estremeció a la República Dominicana.

La condena de Marlin Martínez causó indignación inmediata en el país caribeño, por lo que miles de seguidores de este notable caso tomaron las redes sociales para arremeter contra la decisión de los jueces, expresando que no fue suficiente.

Cientos de dominicanos, inconformes con la sentencia, se lanzaron a las calles manifestando actos de violencia.

Sobre el Escalofriante Caso:

Lo que comenzó con gran incertidumbre por la desaparición de una adolescente, se convirtió en una desesperada búsqueda masiva que involucró a familiares y a toda una comunidad.

Emely Peguero salió el 23 de agosto del 2017 con su novio, Marlon Martínez, para recoger unos resultados a un centro de salud, sin tener la menor idea que nunca regresaría con vida a casa. La jovencita tenía cinco meses de gestación.

Durante la última audiencia en el caso de Emely, los peritos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) presentaron pruebas materiales del asesinato de la adolescente embarazada, incluyendo el reporte competo de la autopsia, la ropa que vestía la joven, la maleta en la que se ocultó el cadáver y el acta del levantamiento del cuerpo.
Los investigadores dijeron que los acusados, Marlon Martínez y su madre Marlin Martínez, presuntamente ocultaron el cuerpo de la adolescente en la finca de un amigo de la familia.
Los sospechosos habrían movido el cadáver al menos en dos ocasiones a medida que arreciaban la presión pública y la pesquisa de las autoridades.
Según fiscales, el novio de la joven le habría practicado un aborto a Emely, destrozando su vientre y el cuerpo de la bebé, de seis meses de gestación.
El procedimiento clandestino se habría realizado en un apartamento propiedad de Marlin, en donde falleció Emely debido a una hemorragia.
Desde este lugar, Martínez usó el telefóno de la joven para enviar un mensaje de texto a la familia. Marlon se habría hecho pasar por su novia para apaciguar la preocupación que desató su desaparición.
El sospechoso regresó al sitio para meter el cuerpo de la joven en una maleta y llevarlo a la finca. El cadáver fue hallado a un costado del camino en este sector agreste. Según los fiscales, Martínez procedió a colaborar en las labores de búsqueda con la familia de Emely, a la vez que intentaba eliminar las evidencias del aborto clandestino en su apartamento.
El dolor y la rabia carcomen el corazón de Cenoví, la pequeña comunidad en la provincia de San Francisco de Macorís en la que creció Emely Peguero, una adolescente que soñaba con ser abogada y defender a las mujeres de la República Dominicana de la violencia machista, pero fue este flagelo el que terminó por arrebatarle la vida.
Emely tenía 16 años y cinco meses de embarazo cuando fue salvajemente asesinada. Su cuerpo fue encontrado dentro de una maleta al costado de una brecha agreste. El principal sospechoso es su novio, Marlon Martínez, que junto con su madre Marlin Martínez, quien era una prominente funcionaria del gobierno dominicano, habría conspirado para borrar su presunta participación en uno de los más escalofriantes crímenes en el país caribeño.
El miércoles 23 de agosto de 2017, Emely salió a las 8:30 a.m. de su hogar en la localidad de Cenoví, al noreste de la isla. Su novio Marlon Martínez la habría llevado a una clínica de obstetricia para recoger los resultados de unos análisis.
Según las autoridades, esa mañana Marlon presuntamente asesinó a la joven y luego tiró su cuerpo desde el puente Colón, en Cenoví. Martínez, de entonces 19 años, llamó a su madre para planear la desaparición del cuerpo, según Bolívar Sánchez, funcionario de la Procuraduría General de la República.
Marlon aseguró a la familia Peguero Polanco que dejó a la adolescente en una gasolinera, pero la madre revisó las cámaras de seguridad sin encontrar rastro de su hija, así que alertó a la uniformada y comenzó la búsqueda desesperada.
El jueves 24 de agosto de 2017, Adalgisa Polanco, madre de Emely, declaró a la prensa que sospechaba de Marlon y de su madre. “Que me devuelvan a mi niña, tiene cinco meses de embarazo”, suplicó la afligida mujer. “Se la llevaron a abortar”.
Más tarde, Marlon y su madre Marlin Martínez se defendieron en na entrevista televisiva; sin embargo, tras caer en contradicciones, el joven de entonces 19 años fue detenido.
Al analizar registros de geolocalización del teléfono de Emely, las autoridades dominicanas ejecutaron un operativo en el apartamento que compartía Marlon con su madre. Los investigadores descubrieron un colchón y toallas ensangrentadas, lo que reforzó la hipótesis de que a la joven se le provocó un aborto.
Kelvin Jiménez, un empleado de seguridad del exclusivo edificio de los Martínez, relató a la prensa que vio a Marlon deshacerse del cuerpo de la joven.
El miércoles 30 de agosto de 2017, Marlon confesó el asesinato y dijo que el cadáver fue depositado en un basurero del área. Las autoridades no hallaron los restos de la joven en el lugar referido.
El clamor de justicia estalló y los residentes de Cenoví realizaron varias protestas para presionar a los fiscales. Mientras tanto, Eugenio Peguero, hermano de Emely, habría recibido mensajes de WhatsApp en el que testigos afirmaban haber hallado un cadáver dentro de una maleta.
Fue el viernes 1 de septiembre de 2017 cuando el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) informó el hallazgo del cadáver de Emely, con los restos del feto. El forense dijo que el útero de la joven fue perforado y que sufrió un golpe contundente en la cabeza que le hundió el cráneo.
A un año del horrendo asesinato, la familia Peguero Polanco sigue a la espera de justicia. Está previsto que el juicio de fondo inicie este miércoles 29 de agosto a las 9:00 a.m. Las magistradas estimen que habrá condena antes de que culmine el año.
“Que me devuelvan a mi niña, tiene cinco meses de embarazo”, suplicó la madre de Emely. “Se la llevaron a abortar”.
La sed de justicia impera en la comunidad de Cenoví a un año del crimen que estremeció a la República Dominicana.

Una semana después de su desaparición, el 30 de agosto del mismo año, la incertidumbre por su paradero se apoderó de los familiares y toda la sociedad dominicana.

Familiares en principio expresaron la “mano blanda” con que las autoridades trataron Martinez, que era el único que podía rendir cuentas sobre el paradero de Emely, según expresaban.

Las sospechas contra el Marlon y su madre, Marlin Martínez, aumentaron luego de que ambos dieran una dudosa conferencia de prensa pidiéndole a la adolescente que regresara a casa. Ambos se notaban nerviosos, y por ende, las sospechas contra ellos aumentaron.

Emely Peguero tenía 16 años y cinco meses de embarazo cuando su novio Marlon Martínez presuntamente la asesinó con la ayuda de otros implicados, incluyendo su madre Marlín y su tío Henry Martínez, arrestado la tarde del jueves en el Aeropuerto Internacional de las Américas (AILA).
Marlon Martínez dio una entrevista a medios dominicanos clamando el regreso de su novia Emely; sin embargo, más tarde las autoridades revelaron que éste la habría asesinado.
El brutal asesinato de Peguero fue uno de los 153 casos clasificados como feminicidios entre enero y agosto de 2017 por la Procuraduría General de la República (PGR). La adolescente fue asesinada a finales de agosto y estuvo desaparecida nueve días, antes de que su cuerpo fuera hallado en el interior de una maleta.
Durante la búsqueda de Peguero, las autoridades quisqueyanas encontraron los cadáveres de otras dos jóvenes, una de ellas asesinada por su padrastro y la otra por su novio. Según la PGR, Quisqueya registra en promedio 200 feminicidios por año.
En dominicana, el 40% de las jóvenes entre 15 y 19 años han sufrido violencia física, sexual o emocional por parte de su pareja, según la Procuraduría.
Otro caso de alto perfil es de Reyna Encarnación, de 32 años, quien presuntamente fue asesinada por su pareja Víctor Portorreal. El mecánico de 30 años, también está acusado de violar y asfixiar a sus hijas de 6 y 10 años, además de ahorcar a un pequeño de 9 años.
De acuerdo con la fiscalía, Portorreal confesó el atroz crimen a los agentes del Ministerio Público y de la policía que lo interrogaron. La madre del sospechoso lo describe como “muy callado”, “alguien a quien hay que sacarle las palabras”.
Solo en Santo Domingo fueron asesinadas 269 mujeres entre 2005 y 2016, según la PGR.
El Observatorio de Seguridad Ciudadana de la República Dominicana (OSC-RD) define el feminicidio como “un caso de homicidio contra la mujer ocurrido en circunstancias específicas de violencia, consanguineidad, vínculo entre víctimas y homicidas”.
El 44% del total de los feminicidios en Dominicana fueron cometidos en hogares, el 42% en las calles y el 14% en sitios no especificados, según el OSC-RD.
Las mujeres son más propensas a ser asesinadas entre los 18 a 34 años, según la organización. Los crímenes generalmente se realizan con armas de fuego y armas blancas y los autores son comúnmente esposos, novios o exparejas.

Marlon Martinez fue detenido el 25 de agosto de 2017, y un día después recibió tres meses de prisión preventiva. Su madre fue apresada una semana después de la desaparición de la menor y recibió el mismo tiempo de prisión preventiva, bajo cargos de complicidad.

Justo antes de esta medida, la reacción de un pueblo airado no se hizo esperar, ya que cuando Marlin Martínez entró al Palacio de Justicia de la provincia Duarte, un mar de personas se le vino encima y trató de lincharla a pedradas y botellazos. Fue entonces que dio inicio una batalla legal entre las dos familias.

Pero mientras los días pasaban, más crecía la incertidumbre por el paradero de Emely Peguero en su poblado natal, San Francisco de Macorís, y en toda República Dominicana.

Emely-juicio final

En la noche del 31 de agosto las autoridades dominicanas confirmaron el hallazgo del cuerpo de Emely en el sector La Guama, sector de la Provincia Espaillat. El cuerpo de la menor se encontraba en estado descomposición introducido en un saco y encerrado en una maleta.

“Son desalmados, son psicópatas…hizo su novela y no quiso que tuviera fin, para que no se encontrara el cuerpo”, fueron uno de tantos de los conmovedores testimonios de la madre de Emely, Adalgisa Polanco.

Marlin Martinez, quien ocupaba un prestigioso puesto político como Subdirectora de la Dirección General de Pasaportes en Dominicana, fue destituida por el presidente Danilo Medina el 2 de septiembre, 2017. Esto dio inicio a la audiencia preliminar de la audiencia y consecuentemente al juicio de fondo.

El joven de 20 años no solo pidió perdón a los padre de la adolescente embaraza, también insistió en la inocencia de su madre.

Tras presentarse las pruebas y la declaración de 17 testigos, el 25 de abril del 2018, los implicados fueron formalmente acusados por la muerte de Emely. La procuraduría pidió una condena de 30 años para Marlon y 20 para su madre.

El pasado 31 de octubre se escucharon los argumentos finales en el caso Emely Peguero, y ahora toda la nación dominicana está pendiente al veredicto final, a realizarse este miércoles 7 de noviembre.

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