NUEVA YORK - Tres personas involucradas en la masiva explosión de gas de 2015 en el East Village de Manhattan que dejó muertas a dos personas, más de una docena más y arrasó con tres edificios recibieron su sentencia este viernes.
Maria Hrynenko, de 59 años, Athanasios "Jerry" Ioannidis, de 63, y Dilber Kukic, de 44, fueron condenados a una pena de 4 a 12 años de cárcel cada uno por los cargos de homicidio involuntario en segundo grado, agresión en segundo y tercer grado e imprudencia temeraria. Un jurado encontró al trío culpable a finales del 2019.
Los fiscales acusaron a un propietario y a dos trabajadores por manipular una línea de gas ilegalmente, lo que supuestamente provocó la explosión en la Segunda Avenida.
Tras el veredicto, el fiscal de distrito de Manhattan, Cyrus Vance Jr., dijo que la decisión "pone a los propietarios, contratistas y gerentes en aviso: mi oficina presentará cargos penales contra aquellos que ponen la conveniencia y la ganancia financiera sobre la vida y la integridad física".
Un trabajador del restaurante y un cliente en el restaurante de sushi, ubicado en uno de los edificios derrumbados, murieron en la explosión. Sus cuerpos gravemente quemados fueron descubiertos por rescatistas que excavaron los escombros días después.
Cuando comenzó el juicio en septiembre de 2019, los fiscales indicaron que las acciones de los acusados mostraron "un desprecio flagrante por el bienestar de los demás".
Fuentes familiarizadas con la investigación le dijeron previamente a nuestra cadena hermana NBC 4 New York que meses antes de la explosión, inspectores encontraran la línea de gas en el sótano manipulada con una manguera de goma para evadir el medidor de gas de Con Edison. Esto podría haber ahorrado dinero y tal vez permitió que fluyera el gas a algunos apartamentos que aún no habían sido autorizados para el servicio. Se registraron violaciones de seguridad y se ordenó un cierre inmediato hasta que se corrigiera el problema, dijeron las fuentes.
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En ese momento, nadie fue acusado de algún delito y el caso fue tratado como una violación de seguridad por parte de los inspectores, dijeron las fuentes.
