NUEVA JERSEY – El niño de 13 años acusado de golpear a una madre mexicana en Passaic se presentó en la corte el miércoles en medio de protestas. Decenas de residentes se congregaron frente al tribunal para demandar que el menor fuera acusado de un crimen de odio.
La comunidad mexicana expresó su apoyo a Beronica Ruiz, quien presuntamente fue atacada el 19 de junio por el adolescente, acusado de acosar a su hijo de 12 años y un estudiante de séptimo grado de la escuela para niños superdotados Passaic Gifted And Talented Academy School No. 20. El incidente ocurrió en la esquina de la calle Monroe y Lexington Avenue.
“Lo que a mí me hicieron, toda mi familia lo está sufriendo, mis hijos, mi esposo. Estábamos bien y en un segundo nos cambió todo”, dijo la madre.
“Estamos buscando que la gente, las escuelas tomen consciencia que es un problema grave que no puede continuar, el bullying, el racismo”, comentó Alfonso Vásquez, esposo de Ruiz.
De acuerdo con la investigación, un grupo de estudiantes, presuntamente afroamericanos y dominicanos, arremetieron en contra del niño y de otros menores de origen mexicano en la cafetería de la escuela. Los presuntos acosadores les gritaron que regresaran a México, entre otros insultos raciales y xenofóbicos, según la pesquisa.
El niño notificó al personal de seguridad, por lo que fue aislado por varias horas. Dan Santiago, abogado de la familia, dijo que la administración del plantel no notificó de inmediato a los padres que el menor estaba retenido por su seguridad.
La madre acudió a la escuela horas después para recoger a su hijo y para conversar con el director acerca del incidente, comentó el abogado.
Al marcharse de la escuela, los estudiantes acusados acecharon al niño en represalia por informar a los educadores, pese a que estaba acompañado de su madre a unas tres cuadras de la escuela, según Santiago.
Ruiz Vásquez empujaba a su hija de solo un año en un cochecito cuando uno de los presuntos acosadores se acercó y trató de golpear al menor.
Santiago dijo que la madre intervino y trató de defender a su hijo, cuando recibió un puñetazo que le dejó el rostro fracturado y con varias laceraciones y hematomas.
La madre perdió la conciencia y fue hospitalizada debido a una conmoción cerebral, según las autoridades.
El menor fue acusado de agresión agravada, pero la comunidad mexicana pide cargos de crimen de odio.
“Pensamos que la agresión tuvo una motivación y esa motivación se basa en un crimen de odio”, comentó el cónsul general de México, Jorge Islas.
“Él hizo mucho daño y las cosas que hizo tienen que tener consecuencias”, añadió la madre.
