NUEVA YORK -- La Ciudad de Nueva York y otros 10 condados de Nueva York ahora están bajo aviso de sequía si las condiciones secas continúan, anunciaron el Estado y la Ciudad el lunes. Este es el primer aviso de sequía en la Gran Mazana en 22 años y además, por este motivo, suspendió las reparaciones de su principal acueducto ante las preocupaciones por la falta de lluvias.
Un aviso de sequía es el segundo de los tres niveles para hacer frente a las condiciones secas. El tercer nivel, y el más severo, sería una emergencia por sequía.
A nivel estatal la gobernadora declaró vigilancia de sequía, pero en 15 condados de la región de Mid-Hudson y de la Ciudad de Nueva York bajo lo elevó a aviso de sequía.
I am declaring a statewide drought watch because of a historic shortage of rainfall.
— Governor Kathy Hochul (@GovKathyHochul) November 18, 2024
I am also elevating 15 counties in the Mid-Hudson region and in New York City to a drought warning. If you live in one of those areas, please conserve water where possible in the coming weeks. pic.twitter.com/4I6ZTxEuZM
New Yorkers, today, we elevated our city's drought WATCH to a drought WARNING.
— Mayor Eric Adams (@NYCMayor) November 18, 2024
We're now instructing ALL city agencies to immediately implement water saving measures, and we're pausing work on the Delaware Aqueduct Repair Project until our water reserves are replenished. pic.twitter.com/Xyfx7XatSB
Los condados bajo aviso de sequía son:
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- El Bronx.
- Delaware.
- Dutchess.
- Greene.
- Kings.
- Nueva York
- Orange.
- Putnam.
- Queens.
- Richmond.
- Rockland.
- Schoharie.
- Sullivan.
- Ulster
- Westchester.
El estado de Nueva York alienta a los residentes de los condados afectados, en particular a los que dependen de pozos de agua subterránea privados, a conservar agua siempre que sea posible durante las próximas semanas.
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“El reciente tiempo inusualmente cálido y la falta de precipitaciones han provocado condiciones secas en muchos condados de Nueva York, lo que ha provocado que los condados del valle del Hudson y del área de la Ciudad de Nueva York hayan sido elevados a estado de advertencia de sequía y vigilancia de sequía a nivel estatal”, dijo la gobernadora Kathy Hochul en un comunicado. “En todo el estado, las restricciones locales de agua y la educación de los neoyorquinos sobre cómo ayudar a conservar los recursos hídricos son pasos cruciales para ayudar a prevenir una escasez más grave hasta que las condiciones mejoren”.
Por su parte, Adams dijo que ha pedido a los Departamentos de la Ciudad que tomen medidas para reducir el uso de agua, y eso incluye una menor limpieza de los vehículos de transporte público.
El lavado de la flota de trenes LIRR, Metro-North y del metro disminuirá drásticamente, junto con el lavado de los autobuses de tránsito, dijo el presidente y director ejecutivo de la MTA, Janno Lieber.
"Nuestros vehículos de la ciudad pueden verse un poco más sucios, y nuestros subterráneos pueden verse un poco más polvorientos, pero es lo que tenemos que hacer para retrasar o evitar una emergencia de sequía más grave. Necesitamos que los neoyorquinos sigan ahorrando agua también, para que podamos regar nuestros parques y llenar nuestras piscinas este próximo verano", dijo Adams.
A las condiciones áridas en todo el noreste de Estados Unidos se les atribuye el surgimiento de cientos de incendios forestales. Además, ya habían obligado a las autoridades de la ciudad y del estado a implementar protocolos para la conservación del agua cuando el alcalde Eric Adams elevó el lunes el nivel de la advertencia de sequía y ordenó la suspensión temporal del proyecto del Acueducto de Delaware, una obra de 2,000 millones de dólares con el objetivo de reparar fugas a lo largo del túnel de 80 años de antigüedad.
La semana pasada, un parque en el extremo norte de Manhattan se incendió, cubriendo a la ciudad con humo, apenas días después de que se registró otro incendio en Prospect Park, en Brooklyn.
El cierre de un tramo del Acueducto de Delaware para reparar filtraciones había estado en proceso durante años.
El acueducto transporta agua por 137 kilómetros (85 millas) desde cuatro embalses en la región de Catskill hasta otros embalses en los suburbios del norte de la ciudad.
A más de 160 kilómetros al norte de Manhattan, el embalse Schoharie estaba a menos de un tercio de su capacidad la semana pasada, lo que dejó al descubierto vastas planicies fangosas a medida que el agua retrocedía. Escenas similares se vivieron en las montañas Catskill en el embalse Ashokan.
“El sistema en general es algo que nos preocupa. … El sistema de la ciudad de Nueva York está al 63% de su capacidad en este momento. Normalmente, estaríamos al 79% de la capacidad. Pero las entradas al sistema del embalse están cerca de mínimos históricos”, dijo el miércoles Paul Rush, quien está a cargo del suministro de agua para el Departamento de Protección Ambiental de la ciudad.
Rush, en una visita al embalse Schoharie la semana pasada, dijo que el sistema de agua necesita una “importante inyección de lluvia”.
El estado recomienda tomar las siguientes medidas para conservar el agua:
- Reutilizar el agua recolectada en barriles de lluvia, deshumidificadores o acondicionadores de aire para regar las plantas.
- Utilizar una escoba, no una manguera, para limpiar las entradas de vehículos y las aceras.
- Reparar las tuberías, los accesorios, los inodoros, las mangueras y los grifos que gotean.
- Lavar solo cargas completas de platos y ropa.
- Tomar duchas más cortas o llenar la bañera parcialmente.
- Instalar accesorios de plomería que ahorren agua.
- No dejar correr el grifo para que el agua salga caliente o fría.
- Lavar los autos con menos frecuencia.
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Parte de esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.