La continuidad del base estadounidense Jeremy Lin con los Knicks pudo haber llegado a su final si el próximo martes, de manera oficial, el equipo de Nueva York comunica a la liga que declina la oferta por tres años y 25 millones de dólares que ha firmado con los Rockets de Houston.
De acuerdo con varias fuentes periodísticas de Nueva York dentro de la organización de los Knicks ya dan por hecho que no podrán competir con los Rockets por conseguir a Lin.
La demostración más clara de que los Knicks no competirán por Lin la dieron el sábado al conocerse la llegada del base Raymond Felton vía firma y traspaso que realizaron con los Trail Blazers de Portland, un movimiento que cerró prácticamente las puertas a la continuidad de Lin como su primera opción de base titular.
Los Knicks, tras recibir la oferta firmada por Lin con los Rockets de tres años y 25 millones de dólares, se quedaron sin espacio en el tope salarial para hacer frente a la propuesta, a no ser que quieran pagar más de 15 millones de dólares en impuesto de lujo.
Ante esta realidad, los Knicks, aunque todavía tienen hasta el martes para responder a la oferta, varias fuentes periodísticas de Nueva York adelantan que el fenómeno Lin llegará con toda seguridad a Houston, donde ya estuvo el pasado diciembre, pero cuando todavía no se había convertido en la gran revelación de la liga.
Los Knicks seguirán trabajando todas las opciones posibles hasta agotar el periodo legal que tienen antes de dar una contestación oficial, pero el panorama no pinta bien para ellos.
Todo lo contrario para los Rockets, que primero le ofrecieron a Lin un contrato por 28 millones de dólares y cuatro años, que ya les ocasionaba a los Knicks un problema del impuesto de lujo, pero menor.
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Fuentes periodísticas neoyorquinas informaron de que Lin recibió con una gran sorpresa la noticia del fichaje de Felton, porque estaba convencido de que los Knicks tenían todo listo para aceptar la segunda oferta de los Rockets.
