Permiten abortos a dos inmigrantes detenidas

La jueza dijo que el gobierno no puede impedir el derecho a interrumpir el embarazo.

Una jueza ordenó el lunes al gobierno del presidente Donald Trump que permita que aborten dos inmigrantes adolescentes embarazadas que están bajo custodia federal.

La jueza de distrito Tanya Chutkan dijo que el gobierno republicano no debe impedir que las jóvenes de 17 años ejerzan su derecho a interrumpir su embarazo.

Ambas jóvenes llegaron al país sin compañía de un adulto y permanecen detenidas en refugios federales, aunque se desconoce con precisión su ubicación.

La Unión Americana de Libertades Civiles fue a los tribunales a nombre de las dos adolescentes, como lo hizo en el caso de otra inmigrante de 17 años que logró someterse en octubre a un aborto estando bajo custodia de las autoridades migratorias tras una batalla judicial.

La actual controversia se debe a la oposición del gobierno de Trump al aborto y su decisión de modificar la política del gobierno anterior sobre los menores que son detenidos al entrar ilegalmente al país. Este año, la oficina del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por sus siglas en inglés) que supervisa los albergues, prohibió a las instalaciones facilitar los abortos sin su aprobación directa.

Una de las adolescentes tiene un embarazo de 10 semanas y la otra de unas 22 semanas, declaró Chutkan. Una de ellas “se acerca rápidamente al límite para que pueda abortar en el estado donde está detenida”, afirmó la ACLU en la demanda.

Los abogados del gobierno habían dejado claro horas antes el lunes durante una audiencia que el gobierno no autorizaría que esa inmigrante tuviera un aborto, señaló Chutkan en su fallo.

El gobierno apeló el fallo de la jueza en su aplicación a la joven que tiene 10 semanas de embarazo. No intentó detener a la adolescente con 22 semanas de gestación de someterse al aborto.

La noche del lunes, una corte de apelaciones en Washington dijo que la joven con 10 semanas de embarazo debe esperar al menos un día más antes de someterse al aborto, para que el tribunal tenga más tiempo para considerar su caso.

Scott Lloyd, director de la oficina del Departamento de Salud y Servicios Humanos que supervisa los albergues, dijo en un correo electrónico que los albergues no deben apoyar la interrupción del embarazo, sino ofrecer “orientación sobre alternativas a favor de la vida”.

Chutkan señaló que la oficina perteneciente al HHS sigue teniendo la “autoridad final para vetar unilateralmente las decisiones reproductivas de las menores que llegaron solas y que tiene en custodia”.

La corte federal de apelaciones en Washington falló en octubre a favor de una adolescente y el aborto se llevó a cabo sin que el gobierno solicitara la intervención de la Corte Suprema.

La adolescente que ganó su caso judicial se encuentra detenida en Texas, donde las menores, para interrumpir su embarazo, necesitan el consentimiento de sus padres o la aprobación de un juez. Las otras dos adolescentes se encuentran en lugares donde las menores no necesitan ese consentimiento, señaló la ACLU, que se negó a precisar el nombre de los estados así como las nacionalidades.

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