Parece que las madres de todas las especies tienen los mismos instintos amorosos por sus hijos.
Emmily Austin descubrió todo esto cuando ella y su hijo de 5 meses, Canyon, conocieron a Kiki, la gorila, ella misma madre de cinco hijos, en un viaje reciente al zoológico Franklin Park de Boston.
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Austin sostuvo a Canyon contra el vidrio de seguridad para ver a los gorilas cuando Kiki se dio cuenta y se acercó a ver al bebé ella misma, quedando fascinada con el bebé.
"Fue tan dulce", dijo Austin al News Center Maine. "Durante más de cinco minutos ella se quedó sentada mirándolo y mirándolo con tanto cariño".
Finalmente, Kiki trajo a su único hijo, Pablo, para que también viera a Canyon.
Aunque Canyon durmió durante la mayor parte de la experiencia, Austin dijo que está emocionada de regresar al zoológico y espera volver a ver a Kiki.
"Cuando entré al zoológico ese día, nunca podría haber imaginado que tendríamos esta experiencia", dijo Austin al News Center Maine. "Fue tan hermoso y caminamos sobre la luna".
