NUEVA YORK — Miles se congregaron en La Gran Manzana para dar el último adiós al bombero héroe del Cuerpo de Bomberos de Nueva York (FDNY) que murió tras caer a más de 50 pies de un puente en Brooklyn, todo mientras respondía a cumplir con su deber para ayudar a víctimas de un horrendo accidente vehicular.
Familiares, amigos y colegas de Steven Pollard acudieron este viernes a la Iglesia Católica Romana del Buen Pastor (Good Shepard Church) en el vecindario Marine Park de Brooklyn, donde extensas filas de uniformados anegaron las calles de dicho sector.
Pollard, de 30 años de edad, estaba asignado al escuadrón Ladder Company 170 del FDNY cuando murió el pasado domingo en el Belt Parkway en Brooklyn.
La multitud saludó el ataúd de Pollard en silencio mientras se escuchaban gaitas tocando el instrumental "Amazing Grace" (Gracia Extraordinaria).
El alcalde Bill de Blasio elogió a Pollar en nombre de toda la ciudad y agradeció a su familia por su heroísmo.
"Ofrezco mis más sentidas condolencias a esta buena familia, a todos los miembros del FDNY, a todos los que conocieron y amaron a Steven", dijo De Blasio.
"Steven era todo lo que queremos en un bombero", expresó el comisionado Daniel Nigro. "Este joven era fuerte, inteligente, trabajador, dedicado y, sobre todo, valiente".
Local
Uno de los compañeros de Pollard lo describió como "un verdadero gigante apacible" que fue un bombero y una persona ejemplar, añadiendo que habían perdido un verdadero héroe esa noche.
Más tarde, durante el servicio, uno de sus mejores amigos destacó el amor de Pollard por la familia, el hockey, los amigos y el Cuerpo de Bomberos de Nueva York.
Un servicio posterior se llevó a cabo en la capilla del cementerio de Green-Wood en Brooklyn.
Entre lamentos y lágrimas, una multitud de bomberos también rindió honores a Pollard a principios de semana al presenciar el momento de que una ambulancia se llevaba su cuerpo.
Pollard intentó saltar de un lado a otro por una división del puente para ayudar a las víctimas del accidente vehicular, pero desafortunadamente cayó a su muerte a unos 52 pies de altura. Fue declarado muerto en un hospital del área poco tiempo después.
Él había estado en el trabajo por un año y medio y es el 1,151 miembro del FDNY que muere cumpliendo su deber.
El padre de Pollard, Ray, es un bombero retirado del FDNY y laboró durante 31 años en el escuadrón Ladder Company 102 en Brooklyn. Su hermano, Ray Jr., actualmente es bombero del FDNY y ha lo ha sido durante 11 años en el batallón Ladder Company 114.
