Indignación por feminicidio de joven embarazada

Diana Carolina Ramírez Reyes, de 22 años, fue asesinada por su pareja en plena calle frente a un escuadrón de oficiales de policía.

ECUADOR – El asesinato a puñaladas de una joven embarazada deja a sus dos pequeños en la orfandad y una oleada de protestas en Ecuador. Los defensores de los derechos de la mujer condenaron lo que consideran la “inacción” de la policía para evitar un feminicidio.

Diana Carolina Ramírez Reyes, de 22 años, fue asesinada por su pareja en plena calle frente a un escuadrón de oficiales de policía y testigos que filmaron el asesinato con sus teléfonos celulares.

"La noche de este sábado 19 de enero, en la ciudad de Ibarra, se provocó el fallecimiento de una ciudadana, producto de heridas corto punzantes ejecutadas por parte de quien sería su actual conviviente", dijo la Policía Nacional en un comunicado de prensa.

El acusado, identificado como Yordy Rafael L.G., de nacionalidad venezolana, tomó a la joven como rehén por al menos 90 minutos antes de asesinarla a sangre fría.

Los testigos revelaron que el sospechoso inicialmente sometió con un cuchillo a la joven madre en una calle de la ciudad de Ibarra, cerca de la frontera con Colombia.

En los videos divulgados en redes sociales se observa cuando el hombre hunde el cuchillo en el cuello y en el pecho de Ramírez Reyes, entonces los oficiales actúan y contrarrestan el ataque.

Sin embargo, los detractores argumentan que los agentes pudieron frenar al presunto agresor ante de asesinar a la madre. Según testigos, el sospechoso amenazó con asesinar a la joven si la policía impedía su escape.

La víctima fue trasladada a un hospital de la localidad, pero no sobrevivió a sus graves heridas.

“La muerte de Diana debió ser evitada con el uso de la fuerza por parte de la Policía Nacional”, expresó la ministra del Interior, María Paula Romo, quien calificó el feminicidio como un “horror inaceptable”.

El jefe de Operaciones de la Policía de Ecuador, general Patricio Carrillo, reconoció el lunes en una conferencia de prensa que hubo fallas en el protocolo de la Policía Nacional

"No hubo una adecuada ponderación de los riesgos", expresó a la prensa.

UN ASESINATO QUE AVIVA LA XENOFOBIA

El asesinato de Diana también desencadenó el rechazo en contra de inmigrantes venezolanos, especialmente porque ocurrió en Ibarra, ciudad a la que llegan los venezolanos que ingresan desde Colombia.

Los defensores cuestionaron las declaraciones del presidente de Ecuador, Lenín Moreno, acerca de reforzar la seguridad en la frontera ecuatoriana y agudizar el escrutinio de los refugiados.

"Les hemos abierto las puertas (a los inmigrantes), pero no sacrificaremos la seguridad de nadie", detalla en un comunicado titulado "¡Todos somos Diana!", expresó el presidente. “Ecuador es y será un país de paz. No permitiré que ningún antisocial nos la arrebate”.

Moreno dijo que ordenó el despliegue de brigada para “controlar la situación legal de los migrantes venezolanos en las calles, lugares de trabajo y en la frontera”.

Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex), un grupo que vela por los exiliados venezolanos, denunció el lunes presuntas agresiones en contra de inmigrantes en Ecuador. Los defensores dijeron que los residentes de Ibarra han quemado pertenencias de los ciudadanos venezolanos en respuesta al asesinato de Diana.

"Repudiamos las tristes, dañinas y violentas acciones realizadas por algunos venezolanos que se encuentran en territorio ecuatoriano como el asesinato de una joven ecuatoriana embarazada", dijo en un comunicado José Colina, presidente de Veppex. “Pero no pueden pagar ni responsabilizarse a todos los nacionales de ese país”, añadió.

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