NUEVA JERSEY – La justicia finalmente llegó para una familia ecuatoriana de Jersey City. Un juez de la Corte Suprema del condado Hudson impuso una condena de cadena perpetua al asesino de una abuela de 81 años, a quien mató de forma brutal para robarle y gastar el dinero en una cita con su novia.
El magistrado destacó la saña de Jeffrey Harley al elegir como su víctima a su vecina, una mujer mayor y frágil que vivía sola.
La familia de Lucila Cárdenas aplaudió cuando el juez anunció la condena a Harley, de 53 años. Con el severo castigo culminan más de tres años de angustia, dijo Armando Solorsano, hijo de víctima.
“Nos da paz porque se hizo justicia. Mi mamá fue una mujer dedicada a sus hijos y luchó sola por muchos años. No era justo lo que le pasó a ella”, dijo Solorsano. “Que Dios toque su corazón”, añadió.
En mayo, un jurado encontró culpable a Harley del asesinato de Cárdenas, una enfermera retirada, sobreviviente de cáncer, que vivía sola en su residencia de Jersey City.
La abuela fue asesinada a sangre fría por Harley la noche del 6 de febrero del 2016. El hombre tocó la puerta y cuando Cárdenas abrió, la golpeó brutalmente, la estranguló y apuñaló en el cuello para robarle dinero.
El juez Patrick Arre expresó que Haley eligió a la abuela como su presa porque sabía que era vulnerable, y por ello la mató de una manera vil. El sujeto ha estado encarcelado varias veces por robo.
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Haley encara una condena vitalicia en prisión por el cargo de asesinato en primer grado y más de 30 años por cometer robo a mano armada y por posesión de un arma con fines ilegales.
