El gobernador Ned Lamont anunció el martes que Connecticut continuará el cierre hasta el 20 de mayo, pues el estado confirmó 1,000 nuevos casos y 45 nuevas muertes. Eso eleva la cifra de casos a 9,784 y de muertes a 380.
Lamont dijo que el 41% de pacientes que fueron hospitalizados desde el 10 de marzo ya fueron dados de alta o se están recuperando. En cambio, solo el 10% de las personas que fueron hospitalizadas han muerto, dijo el mandatario.
Las nuevas hospitalizaciones en el condado de Fairfield, la región más afectada de Connecticut, disminuyeron desde ayer. Se trata del primer decremento desde que comenzó la crisis.
Pero mandatario afirmó que, pese a la leve mejoría, su administración no bajará la guardia. Todos los restaurantes, bares y negocios no esenciales deberán permanecer cerrados hasta el 20 de mayo. Los comercios en el estado han estado cerrados desde el 20 de marzo, cuando el gobernador emitió su primera orden ejecutiva.
Las escuelas públicas también permanecerán cerradas hasta entonces, aunque la fecha podría extenderse si la crisis se recrudece.
