NUEVA YORK - Nueva York retrasó el requisito de que los empleados estatales se vacunen contra el coronavirus o se sometan a pruebas semanales por más de un mes hasta el 12 de octubre, el mismo día en que los trabajadores a distancia deben regresar a sus oficinas.
Las reglas del lugar de trabajo estatal en persona estaban programadas para reiniciarse el martes pasado, y el mandato de vacunación o pruebas entraría en vigencia esta semana para unos 130,000 trabajadores estatales.
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Pero la Oficina de Relaciones con los Empleados de la gobernadora Kathy Hochul describió los cambios en un memorando interno enviado el viernes.
El memo también amplía los mandatos del uso de mascarillas para los trabajadores vacunados. Los tapabocas ahora deben usarse en instalaciones estatales ubicadas en lugares con mandatos locales de mascarillas o en áreas con transmisión alta o sustancial de COVID-19 según lo determinado por los CDC.
Hazel Crampton-Hays, portavoz de Hochul, dijo en un correo electrónico que la administración actualizó la guía "para reducir la transmisión de COVID-19 y garantizar que los lugares de trabajo del Gobierno tengan flexibilidad a medida que nuestros trabajadores estatales continúan regresando de manera segura al trabajo en persona".
Más del 90% de los empleados estatales trabajan en persona a tiempo completo o parcial.
El exgobernador Andrew Cuomo anunció el mandato a fines de julio en medio de un aumento en los casos de coronavirus relacionados con la variante delta, poco antes de su renuncia.
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Cuomo también anunció que las vacunas contra el COVID-19 serían obligatorias para los trabajadores "que se enfrentan al paciente" en hospitales estatales y hogares de veteranos. Los empleados cubiertos bajo este mandato deben recibir su primera dosis antes del 27 de septiembre, según el memorando.
Los sindicatos de empleados públicos estatales tuvieron reacciones encontradas a los mandatos, y algunos líderes laborales dijeron que eran un tema de negociación.
