NUEVA YORK - En Nueva York se registraron más de 3,000 casos positivos del COVID-19 el viernes, el total más alto en un día y la primera vez que se supera ese umbral desde principios de mayo. Esta sería una de las consecuencias de la rápida propagación de la variante delta, según funcionaros de la salud.
En total 3,050 personas dieron positivo por el virus, reportó el sábado la oficina del gobernador Andrew Cuomo en un comunicado, el total más alto en un solo día desde el 7 de mayo. Más de la mitad de ellos están en la Ciudad de Nueva York.
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"Los neoyorquinos lucharon durante mucho tiempo y se sacrificaron mucho para llegar a donde estamos hoy, donde no solo estamos sobreviviendo sino viviendo la vida", dijo el gobernador Cuomo en el comunicado. "Pero nuestra lucha no ha terminado, y lo sabemos porque la variante delta continúa infectando a más y más personas, en particular a las que aún no están vacunadas. No podemos arriesgarnos a tirar por la borda todo nuestro progreso ganado con tanto esfuerzo, así que insto a todos los que todavía necesita su vacuna recibirla de inmediato y ayudar a protegerse a sí mismos, a sus vecinos ya sus seres queridos".
El número de personas hospitalizadas aumentó en un 40% en una semana y el número de pacientes en cuidados intensivos intubados aumentó aproximadamente en un 25%.
El promedio móvil de 7 días del Estado del porcentaje de pruebas positivas ahora se ubica en 2.4%; hace solo una semana era solo del 1.66%.
Una presentación inédita de los CDC, obtenida el viernes por nuestra cadane hermana NBC News, subraya la creciente gravedad de la situación: un estimado de 35,000 infecciones sintomáticas por semana en todo el país entre aquellos que ya están completamente vacunados. No está claro en el comunicado de prensa de emitido el sábado por el gobernador Cuomo cuántos de esos más de 3,000 casos positivos se encuentran entre las personas vacunadas en Nueva York.
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(Aun así, los no vacunados tienen ocho veces más probabilidades de infectarse y 25 veces más probabilidades de ser hospitalizados o morir, según los CDC).
Hay nuevos mandatos del uso de mascarillas sobre la mesa, al igual que las vacunas o pruebas obligatorias para los empleados públicos. Pero incluso cuando Cuomo insta a las empresas a reabrir sus oficinas, los funcionarios federales advierten que la variante delta es una nueva bestia, potencialmente más contagiosa que el resfriado común.
Se espera que el alcalde Bill de Blasio haga un anuncio el lunes sobre un posible mandato del uso de los tapabocas. El viernes, el alcalde estuvo en CNN para discutir los esfuerzos de vacunación y la respuesta de la ciudad a la creciente propagación de delta.
"Abordaremos el tema del uso de las mascarillas. Lo haremos, pero tenemos que asegurarnos de que todo lo que hacemos apoye la vacunación. Sí, puedes hacer más de una cosa, pero es mejor que te asegures de que las dos cosas se apoyen entre sí, especialmente la pieza más importante, que es la vacunación”, dijo el alcalde.
Los Juegos Olímpicos de Tokyo demuestran claramente los riesgos de la variante delta: la ciudad ha establecido nuevos récords de infecciones en la pandemia durante cuatro días seguidos.
"La pandemia de los no vacunados"
Delta, la variante que se encontró por primera vez en India y ahora se encuentra en al menos 104 países, ha aumentado drásticamente su prevalencia en los EE. UU. durante el último mes, y ahora representa más del 80% de las muestras analizadas, según los CDC.
La evidencia científica ha demostrado que la variante delta se propaga mucho más fácilmente que las cepas anteriores del virus y causa resultados más severos para los infectados, lo que provocó nuevos esfuerzos en todos los niveles del Gobierno para vacunar a las personas si no lo han hecho.
Los funcionarios ahora creen que la variante delta puede ser tan contagiosa como la varicela, bien conocida por generaciones de padres como uno de los virus más contagiosos de la vida.
A principios de esta semana, los CDC dijeron que las personas vacunadas infectadas con delta pueden tener la misma carga viral que una persona no vacunada infectada y ser igualmente contagiosas.
La Organización Mundial de la Salud, que la ha calificado como la variante "más rápida" hasta el momento, espera que se convierta en la cepa dominante a nivel mundial.
Dado el subconjunto relativamente pequeño de muestras positivas secuenciadas para evaluar las posibles variaciones de la variante, tanto los CDC como los expertos locales creen que la prevalencia de delta, que se clasifica como una variante de preocupación, es mucho mayor de lo informado.
Se culpa a la variante por un aumento en los casos en los Estados Unidos que ha visto cómo los casos nuevos confirmados diariamente se han quintuplicado desde el 1 de julio: ahora más de 100,000 personas al día dan positivo en todo el país, de nuevo a los niveles vistos por última vez a principios de marzo. Si bien las hospitalizaciones y las muertes diarias siguen siendo comparativamente bajas, esos son indicadores rezagados y pueden aumentar a medida que el delta se propaga en áreas no vacunadas.
Los últimos datos de los CDC muestran que ya están aumentando.
"Hay un mensaje que es muy claro: esto se está convirtiendo en una pandemia de personas no vacunadas", dijo recientemente la directora de los CDC, Rochelle Walensky. "Estamos viendo brotes de casos en partes del país que tienen baja cobertura de vacunación porque las personas no vacunadas están en riesgo".
