Que debes saber
- La ciudad de Nueva York dará despedirá por todo lo alto a la veterana paramédica, Alison Russo, quien fue asesinada en un acto de violencia espantoso y sin sentido en una acera de Queens la semana pasada.
- Varios servicios fúnebres se llevaron a cabo desde el principo de semana para venerar su memoria y culminarán con su entierro este miércoles, donde se espera que un mar de socorristas y agencias del orden y del FDNY acaparen las calles de Nueva York.
- El servicio de Russo, de 61 años, está programado para las 11 a.m. en el Tilles Center for Performing Arts en Brookville, condado de Nassau.
NUEVA YORK - Familiares, amigos y cientos de colegas uniformados se tomaron las calles de Nueva York el miércoles para honrar la memoria y despedir por última vez a Alison Russo, una veterana del FDNY, socorrista del World Trade Center y madre, que fue apuñalada a muerte en un espantoso ataque al azar en Queens la semana pasada.
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El servicio de Russo, de 61 años, se realizó en horas de la mañana el Tilles Center for Performing Arts en Brookville, condado de Nassau.
La familia de Alison Russo, incluidos sus padres, estaban en primera fila, y su padre, incondicional en su dolor, no se anduvo con rodeos. Dijo que vio el video de vigilancia de su asesinato.
"No pude oírla gritar: 'Mamá, papá, ayuda'", dijo con la voz quebrada. "Ese hombre asesinó a mi hija. La mató y abrió un agujero en nuestros corazones y todos sus colegas. Ese hombre asesinó a mi hija y ella sería la primera en acudir en su ayuda si alguna vez necesitara su ayuda. La dejó tirada en la calle como una muñeca de trapo que acaba de ser desechada".
El padre de Russo habló de su devoción de por vida para brindar ayuda médica a los pacientes enfermos, heridos y con paro cardíaco; su compromiso de rescatar trascendió a los humanos y también salvó perros, dijo, llamándola "una persona tan hermosa". Dijo que esperaba que, con el tiempo, los recuerdos de su amabilidad ayudaran a llenar el vacío en tantos corazones.
"Mi familia nunca volverá a ser la misma", dijo el hermano menor de Russo, dijo mientras luchaba por contener las lágrimas. Tampoco lo serán la ciudad de Nueva York, el alcalde Eric Adams y la comisionada interina del FDNY, Laura Kavanaugh.
Olas de miembros del FDNY en uniforme completo flanquearon la calle en un saludo sombrío mientras una lluvia lúgubre caía fuera del salón, donde el ataúd de Russo era escoltado detrás de una escolta policial y una procesión de gaitas.
Una ambulancia, no un coche fúnebre, llevó su ataúd a la sala en un tributo apropiado pero desgarrador a sus décadas de servicio con el FDNY. Se escucharon toques cuando nueve portadores del féretro levantaron su ataúd cubierto con la bandera de la parte trasera del vehículo y lo llevaron lentamente entre los dolientes, muchos de los cuales se taparon el corazón con las manos mientras otros se secaban las lágrimas.
Russo fue ascendida póstumamente al rango de capitana durante el servicio, donde sus afligidos padres estaban sentados en la primera fila junto a su nieta. El alcalde Adams se dirigió a ellos directamente.
"Nos diste a tu hija. Nos diste a tu madre. No hay palabras que puedan definir a los padres que pierden a sus hijos. No hay nada más antinatural que eso", dijo Adams. "Este es un momento oscuro para nosotros. Queremos que la gente sepa cuán valientes heroínas fueron su madre y su hija. Mi corazón está con usted, no como alcalde, no como funcionario electo, sino como hijo de la ciudad". y una persona, un ser humano. Lo siento mucho".
La EMS con 25 años de carrera fue apuñalada más de 20 veces tras ser emboscada por detrás en un ataque no provocado cuando fue a buscar comida desde su estación en Astoria el jueves pasado. Su asesino acusado tiene antecedentes de enfermedad mental y vive cerca de la estación donde Russo pasó tantos años sirviendo a la comunidad.
Kavanaugh dijo que Russo "ejemplificó lo mejor de lo mejor", respondiendo más de 25,000 llamadas al 911 a lo largo de su carrera y aún encontrando tiempo para ser voluntaria, mentora y ser "la amiga a la que llamarías si tuvieras problemas en casa".
"La manera indescriptible en la que nos quitaron a la teniente Russo ha dejado un tremendo vacío en nuestros corazones, pero sé una cosa, nuestro departamento, nuestra ciudad, todo el equipo de paramédicos, es mejor por tener a la teniente Russo", Kavanaugh dijo mientras la promocionaba. "La capitana Russo encarnó tan claramente la misión, la intención, la esencia de ser un paramédico. Corrió hacia el peligro".
Como dijo acertadamente la Jefa de la Oficina de EMS Lillian Bonsignore, "Era imparable".
"Nunca olvidaremos a su madre, su hija, su hermana, la capitana Alison Russo", agregó Bonsignore, e instó a sus miles de colegas a que siempre dejen que sus sirenas suenen por ella.
Un monumento fuera de la comisaría del FDNY solo ha crecido en los días posteriores al ataque. Los dolientes rindieron homenaje allí la semana pasada con gaitas y un momento de silencio, un tributo sombrío y elocuente a la mujer que, según los funcionarios, encarnaba el apodo de EMS de New York's Best (Lo mejor de Nueva York). Los vecinos dejaron flores en la esquina de la calle 20 y Steinway, donde mataron a Russo.
También hubo recuerdos en el Escuadrón de Ambulancias de Voluntarios, donde Russo sirvió en sus días libres. Los vecinos dijeron que le encantaban las actividades al aire libre, pero hablaron más sobre su trabajo con el FDNY EMS.
Russo deja una hija, Danielle Fuoco, quien habló con los periodistas frente a la casa de su madre en Long Island.
"Tengan a mi madre en sus pensamientos, oren por mi familia y recuérdenla como la heroína que fue", dijo Fuoco.
Russo sirvió en EMS durante 25 años, y fue uno de los que corrieron hacia las Torres Gemelas el 11 de septiembre de 2001, dijo la comisionada interina del FDNY, Laura Kavanaugh. La mujer de 61 años fue "mencionada varias veces por su valentía y su trabajo para salvar vidas, y fue absolutamente querida en este trabajo", agregó Kavanaugh.
Ella y Adams brindaron apoyo a la familia antes de que los dolientes entraran el miércoles.
Adams había ido al hospital donde llevaron a Russo después del ataque y dijo: "Perdimos a uno de nuestros héroes. Ella estaba trabajando para esta ciudad y pagó el máximo sacrificio por eso".
Russo fue el miembro número 1,158 del FDNY en morir en el cumplimiento del deber y el segundo EMS en morir en el cumplimiento del deber en los últimos cinco años.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ordenó que las banderas de los edificios estatales ondearan a media asta en honor del teniente de EMS asesinada.
Peter Zisopoulos, el hombre de Queens de 34 años acusado de apuñalar a Russo, no habló con los periodistas después de que fue detenido. Fue llevado a un hospital para una evaluación psiquiátrica y tiene un historial documentado de esquizofrenia, que es la forma en que está conectado con la comisaría donde trabajaba Russo.
La última vez que estuvo hospitalizado, fue transportado por miembros de la misma estación.
Zisopoulos se escapó después del apuñalamiento, pero dos testigos lo conocían y uno de ellos lo persiguió hasta el edificio de la calle 41, dijo la policía. Se atrincheró en su apartamento del tercer piso durante unos 90 minutos antes de que finalmente lo sacaran sin más incidentes, dijeron los oficiales de policía.
Ha sido acusado de asesinato y posesión de armas en el caso y no tenía antecedentes penales.
La información del abogado de Zisopoulos no estaba clara.
