Los casos de la variante Ómicron continúan disminuyendo en Nueva York, y ahora se reducen a la mitad en una semana, según datos estatales publicados por la gobernadora el sábado.
La gobernadora Kathy Hochul reportó 12.332 nuevos casos positivos de COVID-19 el sábado, frente a un total de 27.643 pruebas declaradas el mismo día la semana pasada. Eso representa una disminución del 55%.
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“Estamos superando este aumento invernal y sabemos qué hacer. Sabemos cómo manejar esto. Nadie es más resistente en este país que los neoyorquinos”, dijo Hochul en su comunicado de prensa del fin de semana.
Las señales continúan siendo alentadoras después de que Ómicron llegó al estado y alcanzó récords anteriores.
Pero ahora, con la tasa de positividad del estado cayendo a casi el 5%, y el promedio de siete días no muy lejos, las cosas siguen mejorando.
Las hospitalizaciones también tienen una tendencia a la baja. A menudo visto como un indicador rezagado, pero importante para rastrear el poder de la variante, las hospitalizaciones hace una semana superaban con creces las 10.000. Para el sábado, esa cifra se había reducido en casi 3.000.
"Así que usemos las herramientas: vacunas, refuerzos y mascarillas".
