El NYPD está de nuevo bajo la lupa debido a dos incidentes en los que los uniformados usaron pistolas de aturdimiento para someter a civiles. Uno de los denunciantes es un hombre que recibió la descarga eléctrica mientras sufría un shock diabético.
A medida que las protestas continúan en la ciudad también emergen denuncias de neoyorquinos que habrían sido blanco de abuso policial. Shawn Collins narró a NBC New York que los oficiales lo sometieron a descargas eléctricas de una pistola de aturdimiento durante al menos cinco minutos mientras sufría un shock diabetico en febrero.
Collins dijo que despertó en una cama de hospital ensangrentado, magullado y con las puntas del taser pegadas al estómago. Afirmó que no tenía idea de cómo llegó a la clínica.
"Tenía moretones en la cabeza, me dolía la espalda", dijo Collins a NBC New York durante una entrevista telefónica.
Collins comentó que no se habría enterado del calvario que vivió si no hubiera sido por las imágenes de la cámara corporal de los oficiales. El incidente ocurrió en el refugio de desamparados en el que se hospedaba la víctima, en el Upper West Side de Manhattan.
Los paramédicos se encontraba en el lugar para atender a Collins, pero “todo se salió de control” cuando los oficiales llegaron. Los uniformados usaron sus pistolas de aturdimiento en Collins durante varios minutos a la vez que le exigían que se tirara al suelo. Collins dice que no respondió a las órdenes de los oficiales porque sufría un shock diabético.
"Puedes ver que no respondo, podría mirarte sin saber lo que está pasando", dijo Collins.
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Su abogado, Abraham Rubert-Schewel, comentó que ha presentado un aviso de reclamo por fuerza excesiva y arresto injustificado.
Rubert-Schewel afirma que los oficiales fueron advertidos sobre la condición médica, que puede causar irritabilidad y confusión.
"Una vez que fue sometido por tres oficiales con las rodillas en su espalda, estos oficiales continúan burlándose de él mientras lo esposan", dijo Rubert-Schewel. "Los efectos de una pistola taser en alguien diabético pueden llevar a la muerte".
La Policía de Nueva York dijo que Collins fue acusado de agresión durante el incidente. Sin embargo, su abogado dijo que esos cargos fueron retirados el mes pasado después de que el fiscal de distrito revisó el video.
Si bien se puede escuchar a los oficiales decir que Collins arremetió contra ellos a patadas y mordidas, Rubert-Schewel dijo que eso no justifica lo que sucedió.
"Incluso si resulta como un hecho comprobado que el Sr. Collins mordió a uno de los oficiales después de que fuera atacado, el exceso de fuerza no está justificado", dijo el abogado.
El segundo caso es el de Kenneth Bacote, un residente de Brooklyn que habría quedado ciego de un ojo luego de que los oficiales apuntaron las pistolas de aturdimiento a su rostro a principios de junio. El incidente ocurrió en Kingsborough Houses, en Crown Heights.
Las circunstancias entorno al caso no están del todo claras, pero Bacote fue arrestado y enfrenta cargos. El miércoles por la tarde, en las inmediaciones del cuartel 77, su abogado declinó profundizar en el caso debido a que intenta que los cargos sean desestimados, pero sí dijo que pretende que los oficiales involucrados sean responsabilizados.
La Policía de Nueva York le dijo a NBC New York que el caso está bajo una investigación interna.
