Si bien el gobernador Phil Murphy no mencionó el programa único de subvenciones de $500 para inmigrantes indocumentados en el presupuesto para el año fiscal 2023, el mandatario reafirmó el martes su plan de utilizar un estimado de $53 millones en fondos federales no gastados para la pandemia de coronavirus para proveer asistencia los trabajadores excluidos.
El gobernador propuso en marzo el fondo para los residentes indocumentados que presentan sus impuestos federales con el Número de Identificación de Contribuyente Individual, pero la propuesta no se incluyó en el presupuesto estatal de $50.6 mil millones que Murphy y la Legislatura estatal acordaron la semana pasada.
Manténte al tanto de las noticias locales y del estado del tiempo. Suscríbete a nuestros newsletters gratuitos aquí.
Sin embargo, el acuerdo presupuestario otorga a Murphy un fondo discrecional de $300 millones de la ayuda pandémica no gastada. Le permite asignar hasta $60 millones en proyectos sin necesidad del acuerdo de la Legislatura a través de un voto del Comité Conjunto de Supervisión del Presupuesto, o JBOC.
Esas asignaciones no pueden superar los $20 millones sin la aprobación de JBOC, excepto una asignación de $60 millones. Eso resulta ser lo suficientemente grande como para cubrir el fondo de $53 millones que Murphy propuso en marzo para pagar $500 cada uno a más de 100,000 inmigrantes con un ITIN.
“El gobernador sigue comprometido con establecer el programa para titulares de ITIN que presentó en marzo para ayudar a los contribuyentes afectados por la pandemia de COVID-19, y espera hacerlo dentro de los parámetros del presupuesto del año fiscal 2023”, dijo la semana pasada Christi Peace, portavoz de la administración de Murphy, en un correo electrónico para TELEMUNDO 47.
“Estoy orgulloso de que pudimos traer algo de dinero. A dónde vaya eso desde aquí, no tengo ninguna noticia que dar”, dijo Murphy el martes a los reporteros.
Los Números de Identificación de Contribuyente Individual se otorgan a los empleados que no pueden obtener un Número de Seguro Social y para ayudar a las empresas a cumplir con las leyes fiscales federales, según el IRS.
Noticias
Esta sería la segunda vez que el estado ofrece un programa de beneficios en efectivo para trabajadores indocumentados que ingresaron ilegalmente al país. El Fondo de Trabajadores Excluidos de Nueva Jersey comenzó en octubre y dejó de aceptar solicitudes en febrero con un total de 35,000 peticionarios. El programa ofreció $2,000 para individuos y $4,000 para familias que ganan $55,000 o menos.
El nuevo programa ofrecería $500 y estaría limitado a los solicitantes de ITIN que ganen menos del 200 % del nivel de pobreza.
El 200 % del nivel de pobreza este año es de $33,975 para un hogar de una sola persona, $36,620 para un hogar de dos personas, $46,060 para un hogar de tres personas y $9,440 adicionales por persona por cada miembro adicional de la familia.
Hay alrededor de 460,000 personas indocumentadas en Nueva Jersey, y muchas perdieron sus trabajos durante los cierres comerciales en los primeros días de la pandemia. Trabajando en fábricas, restaurantes y en los hogares de las personas como ayudantes y amas de casa, muchos desarrollaron COVID-19.
Más de 130,000 habitantes de Nueva Jersey, en su mayoría residentes indocumentados, presentan sus impuestos con un ITIN, un número de procesamiento de impuestos disponible para algunos inmigrantes, sus cónyuges y dependientes que no pueden obtener un número de Seguro Social.
A FAVOR Y EN CONTRA
Los legisladores republicanos criticaron a los demócratas por permitir que el gobernador siga administrando lo que calificaron como un "programa impopular".
“Los demócratas que controlan la Legislatura saben que el programa del gobernador Murphy que da grandes pagos en efectivo a los inmigrantes ilegales es tan impopular entre la mayoría de los habitantes de Nueva Jersey que tenían miedo de financiarlo directamente en el presupuesto estatal”, dijo el senador Jim Holzapfel, republicano por Ocean, en un comunicado el miércoles.
“En cambio, crearon un fondo para sobornos que controla el gobernador Murphy y que parece haber sido diseñado específicamente para continuar haciendo estos pagos ridículos. Si creen que el programa es tan bueno y merece los fondos de los contribuyentes, los demócratas deberían haber sido lo suficientemente valientes como para incluirlo en el presupuesto que promulgaron”, agregó.
El presupuesto del año fiscal 2022 requirió cualquier asignación de recuperación federal de COVID que exceda los $ 10 millones para obtener la aprobación de JBOC. La administración de Murphy eludió esa limitación al realizar múltiples transferencias de $10 millones en abril al Fondo de Excluidos de Nueva Jersey, el programa que realizó pagos de $2,000 a $4,000 a hogares calificados de inmigrantes no autorizados.
El asambleísta Greg McGuckin, republicano por Ocean, dijo que la asignación única de $60 millones “no es una coincidencia”.
“Es otro ejemplo de cómo los demócratas abusan del dinero de los contribuyentes, no son transparentes y se niegan a usar los poderes de supervisión de la Legislatura para responsabilizar a la administración Murphy”, dijo McGuckin.
Pero los defensores señalan que es un paso en la dirección correcta para ayudar a contribuyentes que aportan a las arcas con el pago de impuestos pese a su estatus migratorio.
Según un informe de Perspectiva de Políticas de Nueva Jersey de 2020, los inmigrantes indocumentados pagan aproximadamente $587 millones en impuestos estatales y locales cada año.
“Este es un desarrollo positivo y destaca que el Estado tiene el poder de hacer lo correcto por sus residentes”, dijo Laura Bustamante, Gerente de Políticas y Campañas de New Jersey Alliance for Immigrant Justice.
“Pero se debe hacer mucho más para garantizar que la comunidad que no tiene ITIN reciba los recursos de recuperación que se merece. Sin eso, las promesas de 2020 de erradicar la desigualdad estructural y defender la justicia racial fracasan y seguimos pidiendo una recuperación para todos”, agregó.
La defensora dijo que han sido los trabajadores inmigrantes quienes ayudaron a la gente y la economía de Nueva Jersey a sobrevivir la pandemia.
