Nueva York

Disminuye la tasa de positividad de COVID-19 de Nueva York

Los síntomas de la variante Ómicron son más leves que los asociados con cepas anteriores de COVID, pero las hospitalizaciones siguen aumentando. Los CDC dijeron el miércoles que más del 99% de todos los condados de EE. UU. se consideran áreas de alta transmisión.

Telemundo

Lo que debes saber

  • Las tasas virales centrales están experimentando tasas de crecimiento más lentas en todo Nueva York, aunque siguen siendo altas. Las tasas de positividad están disminuyendo incluso cuando los indicadores rezagados, hospitalizaciones y muertes, continúan aumentando.
  • Los síntomas de la variante Ómicron son más leves que los asociados con cepas anteriores de COVID, pero las hospitalizaciones siguen aumentando. Los CDC dicen que más del 99% de todos los condados de EE. UU. se consideran áreas de alta transmisión.
  • Ómicron ahora representa hasta el 99.1% de todos los casos en los EE. UU., señalaron los CDC. Pfizer y Moderna están trabajando en vacunas específicas contra Ómicron, pero los expertos dicen que puede que ya sea demasiado tarde para marcar la diferencia.

El optimismo cauteloso de que Nueva York ha superado el pico de la ola de la variante Ómicron se fortaleció un poco más el miércoles. Este día la gobernadora, Kathy Hochul, informó otra disminución en los casos diarios y una desaceleración del crecimiento en las tasas de hospitalización por tercer día consecutivo.

Se informaron casi 59.000 nuevos casos diarios, un aumento de aproximadamente 10.000 casos con respecto a las cifras del martes, aunque este último puede haber reflejado retrasos en los informes del fin de semana. La tasa de positividad se situó en el 17.37 %, marcando el tercer día consecutivo en el que menos de una de cada cinco pruebas de COVID-19 en Nueva York dio positivo y el único día en ese tramo en el que el número total de pruebas superó las 350.000.

Si bien está muy lejos de las tasas de positividad del 1 % al 1.5 % que la Ciudad de Nueva York informaba hace solo dos meses, a principios o mediados de noviembre antes del surgimiento de Ómicron, es una reducción drástica de las tasas informadas que han superado el 30 % en los últimos semanas.

La tasa de positividad móvil ha disminuido en ocho de las 10 regiones de Nueva York durante los últimos tres días, mientras que los dos aumentos informados solo han visto un crecimiento leve de la infección.

Las hospitalizaciones ascienden a 12.671 hasta el miércoles, el total más alto desde el 26 de abril de 2020 y un aumento neto de 131 con respecto al martes, pero la tendencia de desaceleración de las tasas de crecimiento continúa y es la razón del optimismo cauteloso del estado. Mientras tanto, el número de muertes diarias fue de 166, nuevamente un nuevo máximo desde el lanzamiento de la vacunación masiva.

Sin embargo, las hospitalizaciones y las muertes son indicadores rezagados y se espera que continúen aumentando durante semanas después de que disminuya el aumento de casos.

“Los datos que estamos viendo sobre nuevas infecciones ofrecen un rayo de esperanza de que la disciplina de los neoyorquinos para combatir el aumento invernal está dando sus frutos”, dijo Hochul en un comunicado. "Estamos superando esto, pero debemos permanecer atentos y no dar por sentado nuestro progreso ganado con tanto esfuerzo. Sabemos lo que funciona: asegúrese de que usted y sus seres queridos estén vacunados y con la dosis de refuerzo, use una mascarilla y tenga cuidado en espacios públicos cerrados para que finalmente dejemos la pandemia en el pasado".

Hace un día, la gobernadora parecía aliviada cuando dijo que "parece que podríamos estar superando ese pico" en una actualización de COVID entregada desde su oficina en Manhattan.

Cuando se le preguntó si podría considerar permitir que su mandato de uso de mascarillas en todo el estado, que se extendió hasta el 2 de febrero como parte de su plan de incremento de invierno, caducara en ese momento, Hochul dijo que quería "ganar un poco más de tiempo. Esta tendencia es completamente nueva".

"Tengo que asegurarme de que se mantenga, en primer lugar, y espero que así sea, pero no voy a estar adivinando en este negocio", agregó.

Se está manteniendo hasta ahora, y si bien hay un camino por recorrer, la caída de la oleada de Ómicron podría resultar más rápida de lo que se pensaba, especialmente en términos de casos.

Preservar la capacidad hospitalaria sigue siendo una de las principales preocupaciones del estado. Hochul describió las tasas de admisión actuales como aún demasiado altas, especialmente para las regiones con tasas generales más bajas pero menos capacidad para flexibilizar los recursos para acomodar la afluencia.

La Ciudad de Nueva York y Long Island, por ejemplo, encabezan las listas de pacientes con COVID hospitalizados por cada 100.000 desde el 1 de diciembre, pero no son las regiones que corren el riesgo de abrumar sus instalaciones. Hochul dijo el martes que había detenido los procedimientos electivos en tres regiones, Finger Lakes, Mohawk Valley y el centro de Nueva York, porque las tasas actuales de hospitalización ponen en riesgo la capacidad de camas.

El comisionado de Salud de la ciudad, el Dr. Dave Chokshi, era un poco menos optimista el miércoles que Hochul un día antes en cuanto a la aparente meseta en los casos.

No llegó a calificar los datos más recientes como un "rayo de esperanza", y citó los aumentos continuos en las hospitalizaciones y el factor de retraso asociado con ellos.

Chokshi dijo que es fundamental continuar con las medidas de Ómicron actualmente vigentes, un sentimiento con el que Hochul está de acuerdo incluso cuando considera relajarlas potencialmente en tan solo unas semanas.

Los desarrollos se producen cuando los datos de avance estatal recientemente publicados resaltan en la cruda realidad la fuerza viral que paralizó la fuerza laboral de cada industria clave el mes pasado y continúa afirmando su poder en todo el mundo, razones por las que Pfizer y Moderna están luchando para hacer una vacuna específica contra Ómicron que algunos decir que ya es demasiado tarde.

Sin duda, las tasas virales siguen aumentando en la mayoría de los indicadores clave, pero la tasa de crecimiento parece estar desacelerándose, a veces drásticamente, durante la última semana. El tiempo dirá si se trata de una tendencia prometedora o simplemente de un parpadeo en esta última ola.

El Dr. Anthony Fauci le dijo a nuestra cadena hermana News 4 la semana pasada que pensaba que el pico de Ómicron podría ser cuestión de semanas, y la directora de los CDC, la Dra. Rochelle Walensky, dijo que es posible (aunque no seguro) que los casos disminuyan tan rápido como aumentaron.

A nivel nacional, se cree que la prevalencia de Ómicron llega al 99.1 %, según los nuevos datos de los CDC actualizados el martes. La agencia estima que la proporción de casos de la variante en la región de Nueva York, que para sus propósitos incluye Nueva Jersey, Puerto Rico y las Islas Vírgenes junto con el de Nueva York, llega al 99.7%.

“El aumento repentino y pronunciado de casos debido a Ómicron está dando como resultado un recuento diario de casos, enfermedades, ausentismo y tensiones sin precedentes en nuestro sistema de atención médica”, dijo Walensky en una sesión informativa sobre COVID en la Casa Blanca el miércoles. "El riesgo de hospitalización sigue siendo bajo, especialmente entre las personas que están al día con sus vacunas contra el COVID. Sin embargo, el asombroso aumento de casos de más de 1 millón de casos nuevos cada día ha llevado a una gran cantidad de hospitalizaciones totales".

“Debemos hacer que todos hagamos nuestra parte para proteger a nuestros hospitales y a nuestros vecinos y reducir la propagación de este virus”, agregó Walensky. "Sabemos lo que funciona contra el COVID-19. Esto significa vacunarse y recibir refuerzos, usar una mascarilla en lugares públicos cerrados en áreas de alta transmisión, y actualmente, eso es más del 99 % de nuestros condados, y hacerse la prueba antes de reunirse con otros".

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