Después de que la ‘violencia de tráfico’ en la Ciudad de Nueva York cobrara la vida de seis personas durante el fin de semana -la víctima más joven era un niña de 3 meses-, los activistas realizaron varias manifestaciones en toda la ciudad para exigir al alcalde Bill de Blasio que se implemente una medida clave del programa Vision Zero.
La bebé atropellada por el conductor, que viajaba en sentido contrario en Clinton Hill, estaba en una carriola y era empujada por su madre cuando el vehículo los embistió.
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Los registros muestran que el conductor negligente tiene 35 infracciones de velocidad en zonas escolares y siete infracciones de avanzar en semáforo en rojo solo este año.
Pero el martes el alcalde Bill de Blasio no pudo ofrecer una explicación de por qué su administración no ha implementado una ley del Ayuntamiento que podría haber evitado la muerte de la pequeña.
En cambio, De Blasio dijo que él también desea averiguar por qué el Departamento de Transporte no ha establecido el programa requerido por la ley municipal que firmó en febrero de 2020.
"Quiero averiguar por qué esto no sucedió de manera oportuna", dijo el alcalde durante una conferencia de prensa.
Según la ley de la ciudad, los propietarios de automóviles con 15 o más multas por exceso de velocidad o cinco multas por cámaras de semáforo en rojo en un período de 12 meses deben tomar una clase de seguridad al conducir dentro de los 30 días o la Oficina del Sheriff tendrá la autoridad para confiscar el automóvil.
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Los registros públicos muestran que el Honda Accord 2017 conducido por el residente de Brooklyn, Tyrik Mott, quién mató el sábado a Apolline Mong-Guillemin, de 3 meses, habría sido el objetivo del programa.
El automóvil de Mott tiene al menos 160 infracciones de tránsito desde junio de 2017, incluidas 35 por exceso de velocidad y cinco por pasar los semáforos en rojo en lo que va de 2021.
El comisionado de la policía de Nueva York, Dermot Shea, también dijo el martes que tenía preguntas sobre por qué el programa no estaba funcionando.
"Las leyes son geniales y hemos tenido estas conversaciones muchas veces, pero las leyes sin el seguimiento son realmente insignificantes", dijo Shea durante una entrevista en NY1.
El alcalde De Blasio no incluyó fondos para el programa de conductores imprudentes en su presupuesto ejecutivo en mayo de 2020, tres meses después de que se aprobara la legislación, pero cuando la pandemia de COVID-19 arrasó las finanzas de la ciudad.
El programa se financió con el presupuesto de la ciudad de este año, que se aprobó en junio.
La portavoz del DOT, Alana Morales, dijo que se comenzarían a enviar avisos a los propietarios de automóviles que “califiquen” para los cursos de seguridad para conductores en las próximas semanas. Los cursos comenzarán a finales de año, dijo Morales.
Pero la demora en la ofensiva contra la conducción imprudente causó la indignación de los defensores de la seguridad en las calles, por lo que organizaron una protesta frente al Ayuntamiento, donde los activistas desplegaron carriolas blancas en memoria de los niños que mueren en accidentes de tránsito.
"Exigimos soluciones que aceleren el rediseño de nuestras calles por seguridad, no para la conveniencia de los conductores o la preservación del estacionamiento gratuito", dijo Danny Harris, director ejecutivo del grupo de defensa Transportation Alternatives.
Transportation Alternatives organizó la manifestación en el parque Union Square el martes por la noche para pedir reformas a la iniciativa Vision Zero, que se lanzó en 2014 poco después de que De Blasio asumiera el cargo. El objetivo del programa es reducir el número de muertes por accidentes de tránsito en los cinco condados.
