Africanos y haitianos quieren ir de México a EEUU

Nadie sabe cómo llegaron allí, pero buscan una nueva vida al cruzar la frontera.

Están agotados. En sus rostros hay incertidumbre y tristeza. Son casi 700 migrantes africanos, haitianos y dominicanos varados en la frontera de México con Estados Unidos.

Cientos de hombres, mujeres y niños migrantes de Haití y países africanos llegaron en masa a Tijuana, desbordando las oficinas migratorias para pedir asilo político al Gobierno estadounidense.

Desde el sábado pasado, la garita fronteriza de San Ysidro muestra un panorama poco usual, con una interminable fila de migrantes venidos de horizontes tan lejanos como Guinea, Angola, Congo y Haití, quienes pasan las noches y los días formados, a la espera de ser atendidos por las autoridades migratorias de Estados Unidos.

Nadie sabe explicar cómo llegaron hasta allí, pero lo cierto es que huyen de la pobreza, la violencia y los conflictos políticos en sus países.

La mayoría viene Guinea, Angola, Etiopía, Congo y Somalia. Pero también de Bangladesh, Haití y República Dominicana. Hombres, mujeres, niños y ancianos que esperan en condiciones precarias.

Algunos residentes se organizan y les llevan comida. Toda esa ayuda que aún es insuficiente. Por lo pronto, se las arreglan para enfrentar las inclemencias del tiempo. En una ciudad donde abrazan la esperanza tanto como los sueños de un mejor futuro para ellos y sus familias.

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