Tras considerar que el estrés postraumático fue lo que ocasionó que un abogado perdiera su capacidad eréctil, el Consejo de Estado de Colombia determinó que el sujeto debía ser indemnizado con ayuda psicológica y un tratamiento con viagra, hasta que recupere su virilidad. Es así como la Policía y el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario del país cafetero tendrán que reparar los daños causados, involuntariamente, a este hombre de las leyes. El caso. La historia inicia en febrero de 1999, cuando el jurista adelantaba funciones propias de su profesión, al interior de la cárcel de Arauca (Colombia) y los internos se amotinaron con el fin de fugarse del centro penitenciario. Para controlar la situación, las autoridades tuvieron que responder a los ataques de los reclusos y se formó un motín, con cruce de disparos y el sujeto quedó atrapado en medio de las dos partes, lo que le causó una crisis nerviosa. El abogado presentó una demanda, argumentando que, según el diagnóstico de varios especialistas, sufría de estrés por lo que vivió y esto lo había afectado en su sexualidad, social y familiar. La Sección Tercera del Consejo de Estado señaló que si una persona se ve afectada en su vida sexual, por causas físicas o emocionales, se considera un daño a la salud que debe ser reparado. El fallo agregó que señor tendrá que recibir atención psicológica y viagra, hasta que se compruebe que superó su trauma y vida sexual.
