El mayor Karim Mella, sargento del Ejército de Estados Unidos, se coronó como el primer dominicano en escalar hasta la cima del Monte Everest. Después de haber escalado hasta el punto más alto del planeta, a un costo de $75,000 dólares y dos meses escalando, Mella fue solicitado para que hablara por varias organizaciones acerca de esta y otras experiencias de vida. “Después de ir al Monte Everest, le dije a todo el mundo que quiero este proyecto para llegar a la gente, pero nunca he sentido que lo he logrado”, dice Mella, con los pies bien puestos en la tierra. “Pensé ‘¿Qué pasa con los niños en República Dominicana?’”. Ese sentimiento innato fue lo que lanzó a Mella a su próxima aventura. A penas unos meses después de llegar de su excursión al Monte Everest, echó a andar una organización en República Dominicana llamada Fundación Siempre Más. Mella viaja a su país de origen desde su casa en Tampa, Florida en cualquier momento que él pueda estar fuera por unos días, para motivar a los niños y enseñarles el poder de la perseverancia, el esfuerzo y el trabajo en equipo. “Me llevo a los niños a la montaña”, dice Mella. “Les enseño clases en referencia al medio ambiente. Si no conoces tu país, es difícil que lo ames, y si no te gusta, es difícil que lo cuides. Los llevo hasta allí, y ellos ven el país con otros ojos”. Al mismo tiempo, Mella dice que trata de enseñarles que pueden llegar a ser lo que quieran. El lema de su organización es “Alcanza tu cima”. “Les digo a los niños que no importa cuánto tiempo tome, hay que trabajar duro para alcanzar los sueños”, dice el barbudo de 45 años. “Hoy en día, ellos quieren todo rápido. Quieren todo para ayer. Pero la realidad es diferente”. La realidad de Mella gira en torno a trabajar duro. Después de graduarse de la Academia Naval en la República Dominicana, emigró a Estados Unidos en 1991 y se unió al ejército. Todos los años, Mella elige una gran montaña para escalar en cualquier parte del mundo. Mella dice que trata de encontrar a los estudiantes en las escuelas más remotas de República Dominicana, que a menudo no tienen ni siquiera con qué escribir y tienen que compartir un pupitre. Él ha estado pagando por estos viajes de su propio bolsillo, pero actualmente está buscando patrocinadores. “Vengo de la República Dominicana, y me llegué a la cima del mundo, literalmente”, dice Mella, cuyo próximo gran objetivo es llegar a la cima del Monte Vinson en la Antártida, el año que viene, lo que dará a República Dominicana una presencia en el punto más alto de cada uno de los siete continentes. “Si yo puedo hacer eso, ellos también pueden”.
